La asociación Hispania Nostra, una entidad sin ánimo de lucro que se dedica a la defensa del patrimonio cultural español, recoge desde 2007 en su Lista Roja del patrimonio aquellos elementos que sufren el abandono de las administraciones, con el objetivo de darles visibilidad y, sobre todo, de llamar la atención sobre su estado para que se tomen medidas.
En la provincia de Granada hay al menos 23 monumentos abandonados, que tienen un lamentable estado de conservación a juzgar por la comisión científica que elabora el listado, que trabaja tanto de ‘oficio’ como a raíz de las denuncias públicas presentadas por asociaciones conservacionistas o particulares. En esa Lista Roja también se encuentra un monumento abandonado de Loja, la Fuente Santa.
Sus aguas tuvieron un pasado glorioso, en el que gozaron de gran predicamento como medicinales, sanadoras e incluso santas (de ahí el nombre). Su fama hizo que se adecentara el lugar a finales del siglo XVI con la construcción de una fuente en estilo manierista. “Actualmente se halla muy abandonada, y afeada por vegetación, gomas y cajas de registro”, indican en la web de la Lista Roja del Patrimonio, donde añaden que “su valor histórico, cultural y arquitectónico bien merecerían un mayor nivel de protección y conservación de un elemento tan singular”. Además, alertan de que de seguir así su estado, el monumento podría derrumbarse o desaparecer.
Fruto de su gloria fue su noble y rica ornamentación, con un monumental frontón rematado con el escudo de Felipe II. Durante el siglo XVII se construyeron baños a ambos lados del cuerpo de la fuente. Debido a la gran afluencia de personas que asistían a probar las aguas se dotó al lugar de alguacil y médico. Las aguas llegaron incluso a ser envasadas en cántaras lacradas para la corte de Felipe IV en Madrid, adonde eran enviadas en carretas.