El acoso escolar o “bullying” son palabras de moda entre la población escolar debido a los innumerables casos de intimidación, persecución y de agresiones que se detectan, hoy día, en las escuelas y que llevan a muchos estudiantes a vivir situaciones extremas. Tan de actualidad está que, con motivo del Día del Niño, el próximo 12 de noviembre, el mediático juez de menores de Granada, Emilio Calatayud, estará en el Centro Cívico ‘Adolfo Suárez’ a partir de las seis y media de la tarde, para ofrecer una conferencia sobre la intervención contra el acoso escolar dentro de los actos previstos por el área municipal de Bienestar Social.
“Este año hemos querido traer a una persona conocida, que sabe mucho de menores en situaciones complejas, y que administra la justicia de una manera particular”, expuso la concejala de este ramo, Matilde Ortiz, para una efemérides en la que “queremos visualizar la importancia que tienen nuestros niños, porque ellos son el futuro, a los que debemos plena dedicación”.
La responsable social también se refirió al contenido de la ponencia, donde el magistrado manchego ahondará y resolverá dudas sobre una de las situaciones más frecuentes que se producen entre escolares. “Una charla donde se abordará esta problemática y se darán directrices de cómo afrontarla, porque es difícil detectarla y, ante el menor signo de alarma hay que acudir al sitio adecuado” y que está dirigida a técnicos de la enseñanza, padres y a cualquier persona interesada hasta completar aforo.
Los jóvenes también son un sector de población que sufre esta lacra social, como bien reflejó el concejal de Juventud, José Manuel Sánchez. “El acoso está latente en todos los ámbitos educativos y no sólo es físico o psicológico, sino que ahora los acosadores utilizan las redes sociales o la mensajería instantánea, lo que dificulta aún más que las familias lo sepan por el miedo del acosado a denunciar”.
Con esta conferencia, el juez Calatayud va a “instruirnos sobre los casos de bullying, donde un consejo y una acción en un momento determinado puede cambiar la vida de un menor”, al mismo tiempo, Sánchez animó a los más jóvenes a que asistan para que “reconozcan situaciones similares y las denuncien”.
En la presentación también estuvieron los responsables de la organización de la ponencia, la directora de Servicios Sociales, Ana Ávila, y el psicólogo Joaquín Rivas, en representación del equipo de Tratamiento Familiar, quien informó sobre la elección del tema porque “vimos muy importante abordar el acoso escolar por la trascendencia que supone, no sólo para la víctima que es la que sufre, sino a nivel de su entorno, padres, maestros y compañeros que no saben cómo actuar”.
Además, matizó que el principal escollo con el que se encuentran los profesionales es que “la víctima no se atreve a denunciar por miedo a represalias, no se lo comenta a sus progenitores, lo que le genera una gran impotencia y baja autoestima que arrastra durante mucho tiempo”.
Sobre la intervención en este tipo de casos de violencia, el técnico comentó que es necesario conocer la existencia de una serie de resorte sociales y organismos que protegen a este tipo de víctimas y aludió a que “los padres tienen una gran labor para ayudar a los técnicos educativos y sociales para erradicar el problema, ya que se trata de una labor conjunta”.