Evitar la propagación del coronavirus Covid-19 está suponiendo el cierre de todos los comercios que no son de primera necesidad. Esta crisis sanitaria lo es también económica y tanto comerciantes como empresarios serán uno de los principales afectados por esta situación de emergencia nacional. Buscando ayudar en las medidas de sus posibilidades, el Ayuntamiento de Loja anuncia una batería de medidas que buscan minimizar las cargas impositivas locales que soportan.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, ha anunciado que aprobará una bonificación del IBI del 50% para los locales comerciales, condicionado al no despido de trabajadores, es decir, que el promedio de trabajadores en el ejercicio fiscal sea el mismo. En el caso de los autónomos se les pide que no se den de baja. Para aquellos comercios cuyo local sea alquilado se aprobará una reducción del 50% en el impuesto del IBI al propietario del establecimiento, si se acredita que no le ha cobrado el alquiler a su inquilino durante el forzado cierre del negocio.
Otra medida de ayuda será la exención del pago de la Tasa de la Basura. Se dejará de pagar concretamente la partida de la recogida de basura mientras el comercio no abra por motivo del estado de emergencia que vive el país. La misma exención se aprobará para la Tasa de Ocupación de la Vía Pública. Es el caso de las numerosas terrazas que existen en Loja, no teniendo que pagar un uso que no están teniendo en este periodo.
Camacho afirma que desde el Gobierno Local se hará todo lo que esté en su mano para ayudar a mermar las causas económicas que supone esta crisis, con el fin de que este problema sanitario tenga el menor daño social posible. El regidor muestra todo su apoyo al sector y reconoce la inmensa labor que el colectivo está llevando a cabo, siendo ejemplo de solidaridad.