Fue todo un acierto el cambio de fecha del Concurso Infantil de la Cruz de Mayo a tenor de la participación conseguida. Aunque no era 3 de mayo sino 7, los pequeños no desaprovecharon la ocasión de disfrutar con sus cruces por las calles de Loja. Una mañana soleada que posibilita ver lo mejor de esta tradición que tanto recuerdan los mayores y esperan los menores.
Cerca de 200 niños y niñas participaron en la cita con un total de 25 cruces inscritas. El inicio se mantuvo en la Plaza de la Constitución desde donde se toma nota de todos los que deciden participar en el concurso. Allí se les entrega el primer reconocimiento con las entradas para el ver la película infantil ‘Koporito’ en la mañana del domingo.
Otra novedad de la jornada fue el cambio de recorrido. Por primera vez las cruces iban a cruzar el Puente Gran Capitán. La colorida comitiva cruzó el centro de la ciudad por la Carrera de San Agustín bajando por la Calle Cerrillo de los Frailes, justo en frente de la sede de la Peña Flamenca Alcazaba, coorganizadora de la actividad conjuntamente con el Ayuntamiento.
Hubo bonitas imágenes con el paso por la Iglesia de San Gabriel, donde se hizo un breve descanso. El paso por el puente permitió ver la amplitud del cortejo de cruces. El parque del Paseo de Narváez acogió a los participantes que fueron cortejados con un bocadillo y un refresco, lo que vino bien por las altas temperaturas de la jornada.
Fueron tres miembros de la Peña Flamenca Alcazaba los que, con el presidente a la cabeza, Antonio Cáceres, dirimieron los cinco premios. No fue nada fácil pero se premió la originalidad, los guiños a Loja y al flamenco y la forma tradicional de llevar la Cruz. Principalmente se contó con cruces de flores de papel pero también las hubo de flor Se contó con dos premios de 20 euros, uno de 30, otro de 60 y el primero de 100 euros. El quinto premio recayó en la Cruz del Hogar San Ramón y San Fernando que mostró una cruz de flores de papel muy colorida, haciendo referencia a su diversidad. El cuarto premio reseñó una Cruz también de papel aunque en este caso eran círculos de colores a los que se sumó referencias al flamenco como es el caso de un sombrero cordobés. La recreación de los 25 Caños dio el cuatro premio a una Cruz también de papel con recreación de platos granainos. El segundo premio recayó en una Cruz tradicional de mantón flamenco y flores de papel. Su nombre, La Bailaora, hacía referencia a su movimiento cuando era portada. El primer premio recayó en una Cruz también de papel con trono de doble altura. Se premió la forma de llevarla sus horquilleros que contaron hasta con su propio póstor.
Tanto la concejala de Fiestas, Rocío Ortiz, como el propio alcalde, Joaquín Camacho, se mostraron muy satisfechos de la respuesta de la ciudadanía al cambio de fecha del concurso. Para el primer edil la jornada había sido todo un éxito de participación y desea que esa misma línea se siga en futuros años. La edil por su parte destacó el acierto del cambio de recorrido.