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viernes, 29 de noviembre de 2024

El Museo de la Alcazaba se sumerge en la historia del aceite de oliva, a través de una cata de la DO Poniente de Granada

La jornada divulgativa, abierta a toda la población, cuenta con la visita de los usuarios del Centro de Participación Activa Barrio Alto San José  

El aceite de oliva, su historia y su sabor han sido los ingredientes esenciales para desarrollar una jornada divulgativa y gustativa sobre este oro líquido que se extrae en estas tierras con siglos de tradición olivarera. El marco elegido ha sido el Museo Histórico de la Alcazaba para impartir esta clase magistral, donde la Denominación de Origen Protegida (DOP) Poniente de Granada impartió unas catas dirigidas a la población en general y, en especial, a los usuarios del Centro de Participación Activa (CPA) Barrio Alto San José.  

La propuesta, que parte del propio Museo, vinculó a los participantes con un patrimonio cultural alimentario de profundas raíces mediterráneas, lo que ha permitido conectar “la historia, usos y producción oleícola más cercana con algunas de las piezas de la colección museística de la Alcazaba”, como informaron desde el Área de Cultura. 

A la recepción de los participantes acudió el concejal de Cultura, José Antonio Gómez, quien se refirió a las numerosas piezas que existen en el Museo relacionadas con este producto tan preciado: el aceite, los molinos y sus utensilios, aparecidos en yacimientos arqueológicos de la zona. “Tenemos que remontarnos a Grecia, donde Homero nos habla en su obra la Ilíada de este árbol sagrado que era el olivo que, a lo largo de la historia se ha ido conservando y que nos ha dado este oro líquido que es el aceite”, pasando por otras culturas como romana e hispánica en los siglos VI y VII. 

Sobre la cata dirigida que se organizó ese día comentó que “vamos a apreciar la diferencia entre los diferentes aceites procedentes de la variedad de aceitunas que existen en el Poniente como lucio, hojiblanca, picuda y picual”, por lo que auguró que será “una experiencia muy bonita para los usuarios de este centro de mayores del Barrio Alto quienes comprobarán cual es la diferencia entre unos aceites y otros, como el de este territorio que sobresale  por sus características”. A primera hora de la mañana, se celebró una primera cata abierta a toda la población con una gran presencia de los vecinos del barrio de la Alcazaba que disfrutaron de esta experiencia sensorial.

CONSEJO REGULADOR

Asimismo, el secretario general de la DOP, José Juan Jiménez, se encargó de trasladar a los presentes el conocimiento del aceite, a través de esta cata dirigida, y puso en valor la importancia que tiene este alimento en la tradición, la historia y la cultura de la comarca del Poniente.

“Desde el Consejo Regulador uno de los aspectos que tenemos en cuenta es ligar el aceite con la cultura, porque hay yacimientos del siglo V que demuestran que hay una importante tradición olivarera y estudios que señalan la importancia que ha tenido la industria almazarera en la zona”, explicó el responsable oleícola. 

Una de las finalidades que se pretende desde la DOP es que “cualquier consumidor sea consciente de esa riqueza y aprenda a diferenciar los aceites que caracterizan a esta Denominación que no son sólo de un tipo, sino que al haber una gran riqueza de variedad de aceituna lo hace que tengan una riqueza órgano eléctrica muy singular”, explicó. 

En cuanto a la cata de ese día, Jiménez trató que los participantes distinguieran un aceite de alta calidad de los más normales del mercado y conocieran las características que le da el entorno y el tipo de aceituna que se puede ver en su aroma, su sabor, amargue más menos” –especificó-, al mismo tiempo que agradeció al Ayuntamiento por contactar con la DO para este tipo de prácticas que “esperamos repetirla”. 

Antes de la degustación dirigida, la conservadora del Museo, Rosana Cansino, habló a los participantes de la historia y usos del aceite, a través de un recorrido divulgativo por el escenario expositivo que alberga esta fortificación lojeña. “La presencia del aceite está documentada en el Neolítico y Calcolítico. Civilizaciones como la griega, consideran al olivo como un árbol sagrado, y otras, lo han usado de una manera diferente, como los egipcios que lo utilizaban en cuestiones estéticas con un función hidratante”.  

El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, agradeció la presencia del Consejo Regular en esta actividad, porque son “personas muy relacionadas con el sector agrario que, para nosotros es muy importante, porque hay muchos lojeños que viven de la aceituna y es nuestro oro líquido”. 

En concreto, afirmó de este producto que nace en estas tierras que es “de gran calidad y se exporta en todo el mundo, por lo tanto, es una oportunidad única tener la posibilidad de realizar esta actividad que nos vuelve a nuestras raíces, ya que el campo es uno de nuestros motores económicos principales”.

Destacó la labor de la conservadora y el trabajo que se realiza desde el Área de Cultura porque “no paran de ingeniar para abrir este monumento a la población, convertido en un recurso de primera magnitud para la cultura y el turismo y, con este tipo de eventos, se muestra su riqueza patrimonial” a personas como María, usuaria del Centro San José,  junto a sus compañeras y su directora Juana Mancilla. 

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