El pasado sábado la Hermandad de la Santísima Virgen de los Dolores fue la encargada de organizar el VII Encuentro de Jóvenes Servitas de Andalucía. La Hermandad lojeña es la más antigua de la comunidad autónoma dentro de esta congregación y una de las más activas en el secretariado que la regula. Loja fue durante un día casa para cerca de un centenar de jóvenes cofrades venidos de diferentes localidades como son: Lucena, Sevilla, La Palma, Málaga, Valverde o Pozoblanco, entre otras.
La cita contó con el apoyo del Ayuntamiento de Loja y de diferentes empresas locales y entidades como Confitería Bonachera, Taberna de Pepe, CPA San José del Barrio Alto, Peña Cruz y Cuarta y la Familia Márquez- López. Todo comenzó bien temprano con la entrega de acreditaciones y el posterior desayuno en el salón parroquial de la Iglesia de Santa Catalina, lugar donde el consiliario, Juan Carlos Burgueño, llevó a cabo la Eucaristía. En ella estuvo presente el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, que junto con el Hermano Mayor, Antonio Carlos López, dieron la bienvenida a los participantes.
Tras ello, el Grupo Joven de la Hermandad lojeña, verdaderos artífices del encuentro, organizaron actividades y talleres para sus compañeros. Se centraron en los diferentes carismas de los Servitas: Servicio, Fraternidad, Inspiración Mariana y Misericordia. El objetivo era trabajar cada uno de esos carismas en grupos llegando a una conclusión final y puesta en común. A continuación la mañana continuó con una charla sobre la figura de los Incensarios, algo demandado por los jóvenes cofrades. El vocal de la Hermandad lojeña, Carlos Molina, llevó a cabo una explicación histórica de este personaje y contó con la colaboración de José y Manuel Martín para demostrar el cante tradicional de la sátira.
Gracias al Área de Turismo también pudieron conocer algunos otros monumentos del municipio como es el caso de la Iglesia de la Encarnación. La misma alberga muchas de las Hermandades de la Semana Santa lojeña. También se visitó y rindió homenaje a la Patrona de Loja, la Virgen de la Caridad. Al mediodía la comida se disfrutó en los salones del Centro de Participación Activa de San José del Barrio Alto, donde no faltó de postre el tradicional Rosco de Loja. Ya por la tarde se reunió la junta rectora de jóvenes para acordar las nuevas citas a celebrar y clausurar una jornada que quedará para el recuerdo de estos incipientes cofrades.
