Más de medio centenar de cruces baten el récord del Concurso Infantil de la Cruz de Mayo en Loja

Aunque los cien euros del primer premio recayeron en una clase de segundo curso del CEIP San Francisco, que llevaba una original temática sobre la figura cofrade de los Incensarios, todas las cruces participantes disfrutaron de una mañana repleta de tradición, amistad y compañerismo. Se batió el récord de participantes de un Concurso Infantil de la Cruz de Mayo que cuenta con más de medio siglo de vida. La Peña Flamenca Alcazaba fue un año más la organizadora del evento junto con el propio Ayuntamiento de Loja.
En total se inscribieron 53 cruces con más de 650 niños y niñas. La participación de colegios se notó gratamente. Reseñar la apuesta de colegios como San Francisco, Pérez del Álamo y Victoria, que sacaron casi la totalidad de sus clases a la calle.
En cuanto a temáticas, destacó el colorido y los guiños al municipio. Lemas como ‘Loja es de cine’ o recreaciones de espacios naturales, fueron ejemplos de esa apuesta por lo local. También se contó con el uso de diferentes materiales y flores naturales.
Aunque el concurso se inició a las 10 horas, con las inscripciones, los pequeños ya habían recorrido diferentes calles con el tradicional soniquete que pide una recompensa. La calle Espinosa se llenó de cruces para iniciar el recorrido hacía la plaza de la Constitución. Fue allí donde el jurado, presidido por Antonio Cáceres, máximo representante de la Peña Alcazaba, llevó a cabo su fallo. Cáceres reseñó la dificultad que este año tenía el jurado al contarse con muchas participantes y de gran calidad en su elaboración.
La concejala de Fiestas, Rocío Ortiz, se mostró muy satisfecha de la participación de este concurso y quiso destacar la labor de la Peña Flamenca Alcazaba. La edil admitía que era importante que los colegios se involucraran como así ha sido. Por último, deseó que este ejemplo de participación se siga viviendo en futuras ediciones.
Tras la entrega de premios, en total había 5 con un total de 275 euros, el acalde, Joaquín Camacho, admitía que había sido una decisión del jurado muy complicada. El regidor alabó la colaboración de las familias ya que entiende que con ello se mantiene una tradición tan nuestra. También reseñó la defensa de lo local con cruces muy lojeñas.
La jornada del 3 de mayo se siguió viviendo de forma intensa en todo el municipio. Más de cuarenta cruces de adultos se montaron entre la ciudad y las pedanías. En la urbe destacar las cruces de la asociación de padres y madres del CEIP Victorio y San Francisco. En barrios destacó la Cruz de la Hermandad de Santa Marcela en el Mesón de Arroyo, Cruz de la asociación de vecinos de la Alcazaba y Cruz de la Hermandad de la Santísima Virgen de los Dolores en la Plaza del Carnaval del Barrio Alto. En todas ellas se vivió un gran ambiente, también en la jornada del sábado. Los centros de participación activan también se sumaron a la tradición, al igual que el centro ocupacional.