Fue el pasado 9 de febrero cuando la consejera de Fomento, Rocío Díaz, firmaba la cesión de uso de la nueva Estación de Autobuses de Loja al ayuntamiento. Desde entonces han pasado más de cuatro meses y ningún autobús a partido o llegado a los cuatro andenes de la misma. La demora en su puesta en marcha ha sido criticada por la oposición, mientras el gobierno local reseña las múltiples gestiones que hay que llevar a cabo para su uso.
En la visita del delegado, Antonio Ayllón, a la rotonda de enlace de la A-4154 con el puente Aliatar, el alcalde, Joaquín Camacho, fue interpelado por la situación de esta nueva dependencia municipal. El regidor afirmó que durante estos meses se ha trabajado por parte de la Junta de Andalucía en pasar el contrato de suministro eléctrico de obra a suministro de servicio. Ese trámite, afirma el regidor ya se ha realizado, por lo que el suministro ya ha pasado a ser gestionado por el consistorio lojeño.
Paralelamente a ello, ha informado Camacho, se han mantenido reuniones con los operadores de autobuses de la zona: ALSA, Moreno, Balerma y Maresana, entre otros. “Queremos que la estación sea el centro de los transportes por carretera de la ciudad”, ha ratificado el regidor que reconoce la intención de que la mayoría de las paradas se hagan en El Taxi. También reconoce que se está trabajando en conseguir el mejor sistema de apertura de la estación y en la gestión de la limpieza de este nuevo espacio.
“Estamos avanzando en los trámites administrativos y si todo sigue como está previsto estará en funcionamiento en este verano”, ha asegurado Camacho. En cuanto a la impaciencia de la población pide compresión y reclama a la oposición que no enrede con este tema. “Ya lo hicieron con el CDU y ya no se habla de ese tema”, ha comentado el regidor que opina que no se quiere hablar de lo que va bien en el municipio.
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