La Guardia Civil de Loja conmemoró el pasado domingo 12 de octubre la onomástica de su Patrona, la Virgen del Pilar, con los tradicionales actos de este día. Este año, la intensa la lluvia que caía en la ciudad obligó al cuerpo de la Benemérita a llevar a cabo esta celebración en la Iglesia de la Encarnación en lugar de la Casa Cuartel donde estaba prevista inicialmente.
A mediodía tenía lugar una Santa Eucaristía oficiada por el párroco Juan Carlos Hidalgo en la que se hizo una ofrenda floral a la Patrona en recuerdo de los agentes fallecidos en acto de servicio. El ofrecimiento fue presidido por el capitán de la compañía de la Guardia Civil de Loja, Diego Sánchez, y también por el alcalde Joaquín Camacho.
El templo lojeño, repleto de agentes y familiares de la Benemérita, así como de representantes de la Corporación Municipal y de otros cuerpos como la Policía Local, acogió a renglón seguido la entrega de condecoraciones. En esta ocasión, fueron distinguidos cinco agentes. Se hizo entrega de la Cruz de Plata a la Constancia en el Servicio al cabo primero José Antonio Fuentes Nieto, así como sendas Cruces de Bronce a los guardias civiles Federico Jesús Ruiz García, José Luis Ruiz Arroyo, Sergio Álvarez Trujillos y José Gómez González.
Para poner fin al acto, los presentes cantaron el himno de la Guardia Civil. Posteriormente, agentes y familiares se trasladaron a Riofrío para continuar la celebración con un almuerzo.
El alcalde Joaquín Camacho felicitó al cuerpo de la Guardia Civil “por la inmensa labor que realiza y que la sociedad española reconoce”.