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miércoles, 25 de diciembre de 2024

La delegación lojeña de Manos Unidas realiza este sábado una cuestación para sufragar un proyecto solidario en Bangladesh

En la campaña de 2014 se recaudaron más de 16.000 euros en Loja

Carlos Cuevas En Su Trabajo Como Pediatra

Una nueva llamada a la solidaridad se produce este sábado 7 de febrero. La delegación lojeña de la ONG Manos Unidas ha previsto la celebración de su cuestación anual para la campaña contra el hambre en el mundo. A lo largo de la mañana miembros de este colectivo pasarán por los domicilios y calles de Loja para recaudar fondos que permitan poner en marcha un proyecto humanitario. En esta ocasión el objetivo se sitúa en Bangladesh, concretamente en una zona de campos de té de ese país. 

Según ha informado la delegada lojeña de esta ONG, María Pía Caro, “las condiciones en las que viven los trabajadores de estas plantaciones son durísimas, trabajan 10 horas diarias, recogen las hojas de té una a una recibiendo un salario de 0,50 euros por 23 kilos de hojas. Si no alcanzan ese peso, no cobran. Viven en chozas miserables donde se hacinan todos los miembros de la familia junto con animales domésticos. Hay escuelas primarias diseminadas por las plantaciones que consisten en un aula donde están todos los niños de distintos niveles, juntos. No hay pupitres, ni libros ni recursos. La mayoría de los niños no acaban la primaria y si la terminan, no pueden continuar su educación por falta de escuelas, largas distancias hasta las que hay y falta de recursos económicos”. 

Además, sigue informando Caro, “los que la continúan, se enfrentan a desventajas: lingüísticas (su lengua materna no es el Bangla) étnicas (son tribales), económicas (provienen de familias muy pobres) y educacionales (el nivel de las escuelas rurales es muy bajo). En 150 años, desde que las primeras generaciones de trabajadores fueron llevados a las plantaciones, ni un solo miembro ha podido hacer estudios superiores. Son sólo algunas congregaciones religiosas, algunas ONGs y las Diócesis los que se preocupan por el futuro de estos niños. Y además de luchar con las autoridades locales para que se apliquen las leyes, intentan poner los medios para la educación de los hijos de los trabajadores”. 

Según esta delegada, “los Hermanos Maristas que llevan años en la zona, tienen un ambicioso plan para la construcción de una escuela donde puedan completar sus estudios y un internado para niñas. Para este internado piden nuestra ayuda. Es un edificio que en una primera fase tendrá dos plantas y alojará a 80 niñas, pero que está previsto que en un futuro y dependiendo de las necesidades se puedan construir dos plantas más. La superficie de cada planta es de 395 m” y la distribución muy coherente ya que proponen dos grandes dormitorios, además de las zonas comunes de comedor, cocina, cuarto de estudio y aseos. Manos Unidas financiará el 47% de la construcción y otras ONGs el resto. La contribución local son los terrenos, gastos de permisos, impuestos y planos así como los muebles y equipamiento”. 

La inversión para este internado de chicas se eleva a 78.187,00 euros, y al frente del proyecto se encuentra el sacerdote Eugenio R. Sanz Sánchez, de los Hermanos Maristas de la Enseñanza.

Por último, María Pía Caro ha informado de que la recaudación obtenida el año pasado en Loja ascendió a 16.149 euros.

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