El personaje más peculiar y característico de la Semana Santa lojeña, el incensario, ya cuenta con un monumento en su honor. El Ayuntamiento y la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Loja han promovido la realización de una escultura metálica que reproduce una figura humana ataviada con la vestimenta típica de incensario, con el característico morrión, y por tanto una naveta y un cacharro en sus manos.
Su inauguración estaba prevista para ayer miércoles, sin embargo se tuvo que cancelar debido al luto oficial por el accidente aéreo en Francia. El acto se pospone para este Domingo de Ramos a las 14:30 horas.
La escultura, instalada junto a la conocida como “fuente del Moco”, en la calle Duque de Valencia, ha sido realizada por el escultor Santiago Peña.
La Asociación de Incensarios de Loja subraya que este monumento “viene a hacer justicia con la crucial importancia que tienen los incensarios en la identificación del complejo conjunto de la rica Semana Santa lojeña”.