Era una noche donde el calor era el verdadero protagonista pero quedó en algo secundario a las 23:25 minutos cuando el suelo comenzó a temblar. Cinco segundos de fuerte sacudida que dejó mucho miedo y nerviosismo en miles de ciudadanos de Granada y Málaga que lo sintieron perfectamente. Fueron las consecuencias de dos seísmos seguidos de nuevo originados en la vega de Granada.
Aunque en un principio el Instituto Geológico y Minero Nacional afirmaba que era de una intensidad de 4’6 con epicentro en Chauchina y después lo localizó en Chimeneas con una intensidad de 4’1, tras las mediciones pertinentes se ha calificado como de magnitud 4,5, intensidad V y epicentro en Cijuela. El hecho de ser muy sentido se debe a su superficialidad. Se ha detectado a escasos 5 kilómetros de profundidad.
El segundo seísmo se sumó al anterior tan solo dos minutos después con una magnitud de 3’1 e intensidad IV. En este caso se situaba en Santa Fe a 10 kilómetros de profundidad. Éste ha sido menos detectado por los vecinos de la comarca. El primero sí ha contado con varios segundos de duración lo que ha provocado que rápidamente las redes se llenaran de mensajes confirmando el suceso.
En las redes sociales de EL CORTO DE LOJA se comenzaron a recibir vivencias de lo sucedido. La mayoría de los mensajes destacaban que el temblor se había sentido perfectamente. Algunos reconocían como se habían movido sus muebles, camas y lámparas. El miedo por nuevas réplicas también se hizo notar. Llegaron experiencias de toda la comarca y de localidades de Málaga, incluso de la propia capital malagueña. Según informaron desde el 112 no hubo que lamentar ningún daño personal por estos dos terremotos, que hicieron que el centro coordinador de Emergencias recibiera más de 90 llamadas de particulares que los habían sentido de localidades de Córdoba, Málaga, Jaén y Sevilla, además de Granada.
Sin duda es uno de los terremotos más apreciados por la población en este siglo y parte del anterior. Según los datos sería el sismo más relevante de la provincia desde el 1984. Cabe recordar que fue a finales de enero de este año cuando se produjeron una serie de seísmos que afectaron a diferentes localidades del cinturón de la capital ocasionando daños materiales. En esa ocasión el seísmo mayor fue de 4’4 de magnitud, un punto menos del vivido ayer. En aquella ocasión el llamado enjambre sísmico duró varios días, por lo que las réplicas pueden ser habituales. A pesar de ello anoche no se registraron en Granada más eventos.