El Ayuntamiento de Loja se muda. Las obras para la rehabilitación energética del Palacio de Narváez obligarán al traslado de todas las oficinas municipales a otros espacios cercanos durante un año. Con una subvención de más de 1,5 millones de euros de fondos europeos Next Generation, los trabajos van a consistir principalmente en el cambio de ventanas y luminarias, instalación de aerotermia y placas solares, así como la mejora del aislamiento del histórico inmueble. Unas actuaciones que son incompatibles con el trabajo diario que desempeñan decenas de trabajadores municipales en el edificio consistorial.
De esta forma, el gobierno local viene trabajando en las últimas semanas en el diseño de un plan que permita hacer una mudanza ordenada de las oficinas, con la premisa de “no aumentar el coste” de la actuación con alquileres de espacios y que las dependencias provisionales “estuvieran en el casco histórico”, tal y como ha explicado el regidor lojeño, Joaquín Camacho. El primer edil ha enfatizado en el “difícil reto” que supone esta mudanza y ha asegurado que se ha consensuado con los trabajadores en la mesa de negociación.
El traslado de estas dependencias obligará a realojar el contenido de las oficinas en los nuevos espacios. Habrá que mover, por tanto, mesas, sillas, ordenadores, mobiliario, además de archivos y expedientes administrativos. Además, en las sedes provisionales se deberán realizar pequeñas inversiones para que estén debidamente acondicionadas. Así, el Ayuntamiento destinará a ello unos 70.000 euros, que van a ir, fundamentalmente, a la instalación de cableado de fibra óptica y aires acondicionados y la pintura de los locales “para hacer lo más cómodo posible el trabajo de los funcionarios durante la obra”, ha asegurado el concejal de Eficiencia Energética, Antonio Campaña.
TRASLADO DE 55 PUESTOS DE TRABAJO
Según el concejal, la mudanza comenzará a principios de septiembre y las obras están previstas para la primera quincena de octubre. Los trabajos de planificación previos están siendo, asegura, “un rompecabezas”. Se prevé el traslado de 55 puestos de trabajo, que irán principalmente a tres dependencias: el edificio de El Pósito, la sede de Emuviloja y el local que es sede de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Loja.
El Pósito acogerá el grueso de las oficinas del Ayuntamiento y contendrá los principales servicios al ciudadano. En la planta baja, las salas expositivas de la entrada estarán ocupadas por el personal de Medio Ambiente y Urbanismo. Un poco más adentro irá la Oficina Ciudadana y el personal de Cementerios, además de la Conserjería.
En la segunda planta, la conocida como ‘sala de barro’ irá destinada a los técnicos de Urbanismo (seis puestos) y de Recursos Humanos (cuatro puestos). En la misma planta, la ‘sala de las columnas’ acogerá el tiempo que duren las obras las sesiones plenarias de la corporación municipal, además de las comisiones informativas y las juntas de gobierno local. Y la tercera planta de El Pósito será para los departamentos de Informática (3 puestos), el tesorero municipal y otros dos técnicos.
En la sede de Emuviloja de la plaza de Jiménez Campaña irán 13 trabajadores municipales: siete del Área de Secretaría y seis de Intervención. Las oficinas del Área de la Mujer se trasladarán al Espacio Joven, en la calle Comedias, y contarán con despachos independientes para garantizar una atención individualizada. Y a la sede de la Agrupación de Hermandades, en la Carrera de San Agustín, irán siete puestos de trabajo, entre ellos la coordinación de Alcaldía y el despacho de varios concejales.
DETALLE DE LA ACTUACIÓN
En detalle, la subvención servirá, entre otras cuestiones, para sustituir la caldera actual de gasoil por una de biomasa, instalar una máquina de aerotermia para la generación de refrigeración, mejorar el aislamiento del edificio con cámaras de aire y forjados con falsos techos, instalar un sistema de placas solares traslúcidas en la terraza para la generación de energía eléctrica, sustituir las ventanas por otras más estancas, y cambiar las luminarias a tipo led de bajo consumo. Además, según ha anunciado el alcalde Camacho, se van a mejorar distintos espacios para hacerlos diáfanos y conseguir que sean “más prácticos”.
Esta subvención servirá para “dar un lavado de cara” a uno de los edificios “más emblemáticos” de la ciudad, ha asegurado el alcalde, subrayando la reducción del consumo energético. Según ha detallado, la inversión se enmarca dentro del plan de mejora de edificios públicos municipales situados en el casco histórico, que ya ha intervenido, por ejemplo, en la remodelación de la oficina de Turismo de la plaza de la Constitución.
Para esta obra, Loja recibirá una subvención de 1,4 millones de euros, que se completarán con los casi 300.000 que deberá aportar el consistorio. La actuación garantizará la reducción de más del 30% del consumo de energía primaria no renovable, la accesibilidad, la habitabilidad y la conservación de este histórico inmueble.