El apeadero y la estación de autobuses de Loja centraron parte del debate de la sesión plenaria celebrada el pasado martes. El grupo municipal de Loja Plural presentó una moción en la que pedía la construcción de un nuevo apeadero en la ciudad, ya que el actual en la avenida de Andalucía “tiene unas condiciones nefastas, con una estructura de hierro que soporta una marquesina de chapa y con varios bancos más propios de un parque que de un apeadero”, explicó el portavoz de la formación, Alejandro Ronda, quien recordó también la necesidad de “tener una verdadera estación de autobuses”.
Precisamente, este extremo centró el debate entre los corporativos. Loja Plural pidió que “sea una realidad lo antes posible en una ubicación y con un tamaño acorde a las necesidades de la población, con un buen y rápido acceso a la A-92, un coste económico proporcionado y con una afección ambiental mínima”. Además, propuso que se incluyera en los presupuestos de 2016 de la Junta una partida para su construcción y que se elaborara un informe técnico “para determinar una ubicación adecuada”.
El PSOE mostró su postura contraria a la moción y culpó al Partido Popular de “paralizar” el proyecto que estaba a punto de materializarse “hurtando a los lojeños una estación digna a cambio de un apeadero tercermundista que es el hazmerreir de toda Andalucía”, denunció Juan Francisco Mancilla. El portavoz socialista apuntó que fue el propio alcalde Joaquín Camacho quien envió una carta al Gobierno andaluz “pidiendo la paralización de la obra por estar disconforme con la ubicación”. Si ésta misiva no se hubiese enviado, añadió, “posiblemente hoy tendríamos en Loja una estación moderna, acorde a las necesidades de la población”.
Mancilla recordó que con esta maniobra debía rescindirse el convenio firmado, lo que implicaría redactar un nuevo proyecto y firmar otro acuerdo con diferentes condiciones. El líder socialista pidió al alcalde “que deje de echar balones fuera”, criticando que “Loja ha perdido más de un millón de euros para la estación por culpa del alcalde”.
Un argumento que fue rebatido por el regidor lojeño, quien afirmó que “el alcalde no paralizó nada porque la Junta no empezó nada”. Así, mostró un recorte de prensa con unas declaraciones de mayo de 2010 de la consejera de Fomento por aquel entonces, Rosa Aguilar, anunciando el inicio de las obras en verano de ese mismo año, que estarían acabadas en un plazo de 12 meses. “Yo entré como alcalde en junio de 2011. Si la Junta hubiera tenido voluntad política, en ese momento la estación hubiera estado terminada y la llegada al gobierno de Loja del PP no hubiera sido un obstáculo”, defendió Joaquín Camacho.
El primer edil lojeño expuso que su partido no es partidario de ubicar la estación en Los Pinos, pero que “nunca se ha renunciado al proyecto ni a la subvención, sino que siempre nos hemos ofrecido a la Junta para dialogar en pro de buscar una ubicación idónea”. Camacho propuso como emplazamiento alternativo el silo de Gemalsa, “un terreno municipal en el que el proyecto saldría más barato porque no habría que picar piedra como en Los Pinos”.
En cualquier caso, Camacho pidió a la Junta que empiece la estación en el emplazamiento original “cuanto antes, mañana mismo, porque el terreno sigue estando disponible”. Esta misma petición se materializó en un acuerdo unánime de los grupos al final de la sesión, cuando se presentó “in voce” una moción pidiendo a la Junta que construya la estación “en base al proyecto redactado”.
