Las obras de rehabilitación y mejora de la eficiencia energética del Palacio de Narváez entran en su última fase de ejecución. Tras casi 9 meses de trabajos, llevados a cabo por la constructora Mulconsa Edificación y Civil S.L., se ultiman los detalles para cumplir con el plazo establecido. La mejora cuenta con una inversión total de más de 1,5 millones de euros con una subvención de fondos europeos Next Generation, el Ayuntamiento de Loja aporta más de 300.000 euros de inversión propia. La última vez que se actuó en el histórico palacio del siglo XIX fue a principios de los años 80.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, y el teniente de alcalde delegado de Urbanismo, José Antonio Gallego, han visitado el edificio para comprobar el avance del proyecto. La principal reforma se observa en la última planta del palacio con mejora de espacios en las zonas ocupadas por las Áreas de Urbanismo, Medio Ambiente, Recursos Humanos, Mujer y grupos municipales. Principalmente se ha llevado a cabo el cabio de ventanas, colocación de aire acondicionado y calefacción, división de espacio con cristaleras, techo aislante, suelo vinílico, nuevos puntos de enchufes e internet y nueva iluminación. También se han llevado a cabo mejora y adecuación de servicio y escaleras.
En la planta noble, zona de alcaldía y salón de plenos, se adecúa con nueva iluminación y climatización. La mejora en esa planta es más evidente en zona de secretaria, donde el tratamiento es similar a la de la planta superior. En la zona de acceso se mejora la oficina ciudadana, donde se ha realizado un servicio adaptado a personas con movilidad reducida. Se han colocado cierres con puertas de cristal en los accesos al patio interior, que también ve restructurado la caída de agua hacía su sumidero, lo que mejorará el uso de este espacio. Los bajos, zona del archivo histórico, mejora en su iluminación y climatización.
“Nos podemos sentir orgullosos de esta mejora”, ha comentado Gallego que espera que se cumplan los plazos y a finales de años se pueda entregar la obra e iniciar la vuelta de las dependencias municipales. El edil se mostró satisfecho de la ejecución de proyectos en el municipio y recordó cómo se cuenta con objetivos en marcha y ya ejecutados como: la calle Real, la puesta en valor de le Alcazaba, el Parque Fluvial o el recinto Ferial, entre otros. “Estamos demostrando que se están haciendo las cosas prometidas”, ha enfatizado el concejal.
Para el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, la reforma del Palacio de Narváez permite actuar en el edificio civil más importante de Loja. En ese sentido, cree que la inversión permite que un edificio del siglo XIX siga estando adaptado a las normativas actuales y pueda seguir siendo la sede del Ayuntamiento. “Se permite mantener este servicio en el centro histórico durante los próximos años”, ha asegurado el regidor que entiende que se corría el peligro de tener que trasladar las dependencias al no cumplirse con los requisitos actuales de seguridad laborar o accesibilidad.
Para el alcalde, apostar por el centro histórico debe de verse con hechos. En ese sentido afirma que su gobierno tiene un modelo que se observa en diferentes proyectos. Entre ellos enumeró los siguientes: Ayuntamiento, Alcazaba, calle Real, Centro de Interpretación Histórico, Casa del Marqués e ubicar la biblioteca en la Amuebladora, entre otros objetivos.
Camacho ha aprovechado para referirse a la situación falta de liquidez que vive el Ayuntamiento. El regidor admite que se vive momentos de “tensión” económica por el adelanto del pago de muchas subvenciones, pero afirma que la situación se restablecerá en cuanto estás lleguen y se materialicen. “Somos la localidad que más fondos europeos por habitantes gestiona y es una oportunidad que no podemos perder”, comenta Camacho que cree que esos fondos son claves para actuar en proyectos muy importantes que de otra forma no se podrían hacer. Ante esto, afirma que se están buscando fórmulas para no tardar en el pago de facturas e insiste en que no se está hipotecando la ciudad “como en tiempos pasados”.
