Desde unos días se encuentran en la residencia de discapacitados ‘Sierra de Loja’ los pequeños saharauis Bahía y Mustafá, que tienen la oportunidad de pasar este verano en este centro dentro del programa ‘Vacaciones en Paz’. Estos menores con discapacidad reciben la atención médica y terapéutica necesaria durante su estancia, y participan, junto al resto de usuarios, en las actividades que organiza la residencia gestionada por Grupo Alfaguara.
Los dos pequeños se han adaptado perfectamente al centro y han vuelto a suponer, como cada año, un revulsivo para el resto de usuarios. Así lo explica el director del grupo, Álvaro Morales, quien pone de manifiesto la “ilusión y motivación” de los trabajadores “por prestar la mejor atención posible”. El responsable recuerda que es un programa pionero y anima a otras residencias a que participen en esta “experiencia extraordinaria” que, aunque complicada, resulta ser “muy enriquecedora”.
La presencia de ambos menores, que vienen acompañados por su monitora Habiba, está dando “mucha vida al centro”, como destaca Laura Daniello, una de las trabajadoras de la residencia, que espera que el proyecto siga celebrándose muchos años más.
Un total de 80 niños saharauis están siendo acogidos este verano en la provincia de Granada. El trabajo con ellos no sólo se centra en su estancia aquí, sino también se hace un seguimiento antes de que vengan y después de que vuelvan a sus hogares. María Jesús Justicia, representante de la Asociación Granadina de Amistad con la República Árabe Saharaui Democrática, se muestra muy agradecida con la residencia por el trabajo que hace con estos menores discapacitados, a los que presta una “atención sanitaria muy buena”.
Para conocer de primera mano cómo se desarrolla esta iniciativa, el centro recibió la visita de la delegada de Inclusión Social, Matilde Ortiz, quien mostró su satisfacción por el trabajo que realizan los profesionales. “Loja se muestra solidaria con estos pequeños, para que tengan unas buenas vacaciones con nosotros”, resume la delegada, quien recuerda que los menores “vienen con unas circunstancias muy especiales, además de las que tienen en su lugar de origen”.
En similares términos se expresaba el concejal José Antonio Gómez, que acudía en representación del Ayuntamiento de Loja. Para el edil, esta iniciativa se puede resumir en dos palabras, “solidaridad”, por la acogida de estos pequeños, e “integración”, para que sean uno más entre los usuarios “y participen en numerosas actividades que se realizan durante el verano”.
