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viernes, 18 de octubre de 2024

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Bonachera - Roscos de Loja

Los bomberos de Loja rescatan con vida a una mujer de Huétor Tájar que se había caído al pozo de su vivienda

La mujer, que sufrió síntomas de hipotermia, fue trasladada a un hospital de Granada

Las Representantes De Ambas Entidades En El Momento De Suscribir El Convenio

Los bomberos del Parque de Loja rescataron ayer por la mañana (20 de marzo) a una mujer de 66 años de Huétor Tájar que se había precipitado al pozo que hay en su casa, junto al lavadero. Fue, a decir de Manuel Martos y Juan Antonio Conde, los dos bomberos lojeños que sacaron con vida a esta señora, “uno de esos días en que uno se siente útil, una de esas acciones que le llenan mucho a uno como persona”, expresaron tras la difícil, laboriosa y arriesgada operación.
Ambos bomberos se encontraban de servicio esa mañana cuando, a eso de las 9:20 horas, recibían una llamada por la que se les comunicaba el incidente. En pocos minutos se personaban en el número 29 de la calle Doctor Lorca Valverde, de la localidad hueteña, encontrándose con una familia angustiada ante el peligro de muerte que estaba sufriendo la mujer. Por razones que se desconocen, aunque bien pudieran deberse a un descuido o haber resbalado, lo cierto es que esta señora se encontraba a más de 10 metros de profundidad con respecto a la boca del pozo, uno de esos tantos que existen aún en casas que se encuentra en zonas de acuíferos o en las riberas de los ríos para uso doméstico. Se encontraba rodeada de agua aunque asida a un saliente de la pared que impidió que, fruto del cansancio, se hubiese sumergido aún más, pues las aguas tenían todavía una profundidad de unos cinco metros, y todo ello en un cilindro con un diámetro de un metro.
Inmediatamente prepararon todo el dispositivo técnico que precisó, además de otros mecanismos de rescate, tres poleas, una para la señora siniestrada y el bombero Manuel Martos, que fue quien descendió, otra individual para el propio bombero, y una tercera de seguridad, sistema que iba regulando desde el exterior Juan Antonio Conde. La mujer fue sujetada con un arnés por debajo de los brazos, que además tuvo que replegar sobre el cuerpo para que pudiesen salir por tan estrecha abertura.
Las tareas de extracción duraron alrededor de dos horas y en todo momento existía la posibilidad de que la mujer pudiese caer de nuevo al agua, lo que hizo extremar aún más la pericia de los dos bomberos, que estuvieron auxiliados en las labores de rescate por agentes de la policía local y guardia civil de Huétor Tájar, “una ayuda -dijeron después los bomberos- que fue importantísima para poder concluir con éxito la operación”.
Una vez en el exterior, la mujer fue examinada por sanitarios del centro de salud de la localidad, apreciándose síntomas de hipotermia y evidentes muestras de dolor, pero no mayores consecuencias. No obstante, la paciente fue trasladada a un centro hospitalario de Granada para un más profundo reconocimiento y observación.
Hay que tener en cuenta que la señora estuvo más de dos horas en el agua, pues fue una hora después de que cayera al pozo cuando la familia advirtió su desaparición y comenzaron a buscarla, pero la profundidad de la galería hacía más inaudibles los gritos de socorro.
Un suceso de los que no suelen ocurrir a menudo y que acabo, afortunadamente, con éxito.

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