La tierra no para de temblar en Salar. La localidad vecina está siendo epicentro en los últimos días de un gran número de terremotos, algunos de los cuales han sido sentidos por la población de la comarca y de gran parte de la provincia. El primer susto, en forma de sismo de 3,7 de magnitud en la escala Richter e intensidad IV, lo tuvimos en la mañana del pasado jueves 29 de septiembre. Se detectó a una profundidad de sólo 1 kilómetro y duró varios segundos y generó un gran ruido. A éste le precedieron y sucedieron otros de escasa entidad.
Desde entonces la tierra no ha dejado de temblar, pero con más frecuencia desde el domingo. La población se despertó, a las 7:44 minutos, con un temblor de 3,6 de magnitud, e intensidad IV, con epicentro en Huétor Tájar y con una profundidad de sólo 2 kilómetros. 45 minutos antes se produjo otro de 2,9 e intensidad III. Después de estos mayores, el resto de movimientos no han superado la magnitud 2,7. Según los datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN) consultados por El Corto de Loja, la mayoría se han registrado en Salar pero también otros en Huétor Tájar. En total, desde los primeros terremotos del jueves por la mañana y hasta mediodía de hoy, lunes 3 de octubre, el IGN ha contabilizado un total de 91 sismos.
Este episodio de terremotos encadenados recuerda, y mucho, al enjambre sísmico que se vivió en el Área metropolitana de Granada en enero de 2021, que afectó sobre todo a Santa Fe y Atarfe. Aunque en aquel entonces se sintieron varios terremotos por encima de la magnitud 4 y los terremotos, más de mil, se extendieron varias semanas.
