El Ayuntamiento de Loja ha vuelto a ceder una de las naves del polígono El Frontil a un joven emprendedor lojeño para que pueda desarrollar su actividad empresarial. En este caso, el beneficiario ha sido Antonio Ramos Castilla, propietario de una empresa de construcciones y reformas, que tendrá en este espacio una oficina para atender a los clientes y un almacén para materiales y maquinaria.
Ramos toma el testigo de su padre al frente de esta empresa que cuenta con cuatro trabajadores. Afirma que la cesión de esta nave supondrá de gran ayuda para su actividad al no tener que pagar el alquiler durante los primeros 18 meses. “Los inicios siempre son duros, porque se tiene que invertir mucho dinero en comprar material, que suele ser caro”, declara este joven empresario que dice sentirse “contento” y “agradecido”.
Es una de las cuatro naves que el consistorio tiene en el Centro de Iniciativas Empresariales y que pone a disposición de los lojeños que quieran poner en marcha su propio negocio. El joven beneficiario podrá permanecer en este espacio durante siete años. El primer año y medio no tendrá que pagar el alquiler, los 18 meses siguientes pagará la mitad del precio público y el resto, hasta los siete años, el coste normal de la nave, “que aun así está muy por debajo del valor de mercado”, comenta la concejala de Desarrollo, Paloma Gallego.
Durante la firma del contrato de cesión, el alcalde Joaquín Camacho ha afirmado que “el Ayuntamiento quiere dar apoyo a las personas que generan riqueza en la ciudad, que son los pequeños y medianos empresarios”. El regidor se ha referido además a “la ciudad industrial que debe ser Loja” y al “granito de arena” que pone el Consistorio “para respaldar a los nuevos empresarios”.
