La Semana Santa es una de las fiestas más destacadas del calendario lojeño. Al número de hermandades y cofradías que protagonizan esta celebración se suman la inmensa mayoría de ciudadanos que la siguen ya sea por motivos de fe, o por motivos socioculturales y festivos. En cualquier caso, lo cierto es que son días en que las calles se llenan de gente y el ambiente de la ciudad cambia totalmente con respecto al resto de jornadas.
Tal es así que durante el Jueves y Viernes Santo, en primera instancia, y el resto de días de pasión en segunda, la afluencia de visitantes, ya sean turistas nacionales o internacionales, crece de forma muy notable.
Así se percibe, sobre todo, en los establecimientos hosteleros, en los que la ocupación puede alcanzar, en algunos casos, casi el 100%, redundando positivamente en el resto de establecimientos. Bares, restaurantes, casas rurales, amén de los hoteles propiamente dichos adquieren una animación especial. No hay que olvidar que Loja cuenta con unas mil plazas hoteleras que se reparten entre el cinco estrellas gran lujo del Hotel Bobadilla, pasando por el cuatro estrellas Almazara, en Riofrío, los dos tres estrellas de las áreas de servicio Abades y Manzanil, y un buen número de plazas en establecimientos de dos y una estrellas tanto en la ciudad como en diferentes núcleos de población lojeños.
La concejal de Turismo del Ayuntamiento de Loja, Lari Muñoz, afirma que la Semana Santa de Loja es una gran ocasión para la difusión y el conocimiento del municipio, tanto en su vertiente cultural, como en la patrimonial, natural o gastronómica, por citar sólo algunos de los principales atractivos del municipio.
Según la responsable de las oficinas y centros de información turística, así como de la gestión y organización del área, estas fechas deben aprovecharse al máximo, pues “en buena medida se configuran como la tarjeta de presentación de nuestros recursos turísticos, hasta el punto de que, quien visita Loja en Semana Santa y le gustan sus características, es más que probables que repita su visita en otro momento”.
Además, la edil de Turismo afirma que el efecto boca a boca es fundamental para la difusión de la oferta lojeña. Así mismo asegura que protagonizar algunos minutos de la programación de cadenas televisivas, como Canal Sur TV que emitió en directo la salida del desfile procesional de Jesús en el Huerto, es de gran trascendencia para dicha difusión.
En suma, Lari Muñoz espera que el turismo aporte un año más unas buenas cifras de negocio para los establecimientos hosteleros, así como para el sector comercial, que se ve igualmente beneficiado por la afluencia de público foráneo.
