En Loja es típico escuchar a principio de agosto un soniquete que parece un pájaro cantarín. Son las tradicionales aguaeras, que enfatizan la celebración del Jubileo del Perdón, una conmemoración cristiana de uno delos eventos de la Iglesia. Tal soniquete es un canto a la tradición de los barrios de Loja, donde los más pequeños disfrutaban del agua ante las altas temperaturas del verano.
Recuperar esa sensación tan nuestra es lo que persigue el Ayuntamiento de Loja con su apoyo a la Peña La Orza. Aunque no será el 2 de agosto, como marca el calendario, sino el sábado 6, esta peña repartirá 200 aguaeras entre los pequeños que se acerquen a su sede. El acto está abierto para todo aquel pequeño que desee acudir, siendo el inicio a las 11 horas. Recordar que la Cueva del Tío Dani, como se conoce el local de esta peña, se ubica en el Barrio Alto, justo al lado de la Iglesia de Santa Catalina.
La concejala de Participación Ciudadana, Encarnación Murillo, asegura que tras dos años de parón el objetivo es volver a recuperar esta tradición. La edil agradece la apuesta de la peña lojeña por la defesa de lo nuestro. Para que todo sea un éxito, Murillo pide a los pequeños de todos los barrios y pedanías que acudan a conseguir su tradicional aguaera y que la hagan sonar por todo el municipio.
En representación de la peña acudieron José Fernández y Enrique Barranco. Éste último desea que todo salga bien tras dos años sin celebrarse esta actividad y espera que con ello se mantengan las tradiciones. Éste agradeció el apoyo del Gobierno Local y desea que se sigan recuperando eventos como es el caso del arrastre de las latas o los cabezudos.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, enfatiza que este pequeño elemento es muy lojeño y tradicional, por lo que su fomento es importante. El regidor cree que hay una obligación de mantenimiento de lo nuestro y también de reconocimiento. Camacho anima a la participación de todos los lojeños y pide que se escuchen las aguaeras por todo el municipio. Por último, agradece la labor de esta peña que defiende ésta y otros elementos muy lojeños.
