Como la sangre discurre nuestras venas, se rememora la Pasión de Cristo por las calles de Loja. La Semana Santa Decana de la Provincia, al igual que las del resto de Granada, late como corazón esperanzado con el fin de recorrer calles y caminos. Los cofrades esperan el momento para sacar a relucir sus sentimientos tras larga espera. De producirse, será un momento humano, tanto como nuestra sangre, pero no menos divino, tal cual lo es la del Nazareno.
Esa sangre cubre toda la obra que el reconocido cartelista Fernando Vaquero ha creado para la Semana Santa de Loja. Rojo Pasión, con mayúsculas. Aquel que crea un círculo cromático que da sentido a todo. Un color que hace humano al más divino y más divino al humano. A ello se une el “aglutinante perfecto”, Jesús de las Tres Caídas, impoluto Nazareno de Domingo Sánchez Mesa que inunda calles cada Miércoles Santo en el extremo más extremo del poniente de Granada.
Vaquero reconoció su satisfacción de tener el honor de crear su primera obra para la provincia nazarí. Recordó la búsqueda de referencias y como todo quedó enlazado en la figura de este Nazareno. “Siempre me ocurre que cuando tengo 5 o 6 bocetos vuelvo al primero”, reconoció el autor con la emoción de ver la bondad en los designios de su obra. La utilización del rojo entiende que da sentido “al dolor y la pasión” de un Señor que “baja la mirada para cargar con nuestros pecados”.
La nueva obra pictórica de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Loja tiene unas dimensiones de 100 por 87 centímetros. Es una pintura realizada en óleo sobre lienzo en la que solo se ha utilizado una paleta cromática reducida a colores cálidos. Como explicó el autor, el rojo pasión engloba todo el cuadro reseñando el simbolismo de este color dentro de las celebraciones de la Semana Santa.
El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, junto al presidente de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Loja, Ramón Pérez, fueron los encargados junto con el autor de descubrir la obra. El regidor quedó maravillado de tal representación y reconoció la buena decisión de apostar por obras pictóricas para representar la Semana Santa lojeña. Camacho reiteró su apoyo a la Agrupación y se marcó objetivos para un año que espera se viva en las calles del municipio.
Desde la Agrupación se insistió en la esperanza en una Semana Santa plena y llena de buenas noticias. Pérez agradeció el apoyo de todos los Hermanos Mayores y Consiliarios defendiendo la unidad de los cofrades lojeños. El presidente enumeró algunos de los objetivos que la Agrupación tiene para este curso entre los que se encuentran poner en funcionamiento su sede y acabar la restauración del Corpus Cristi, entre otros.
El acto también sirvió para entregar las pastas a los pregoneros oficiales de este año. Julián Martín, empresario propietario de Grupo Abades, reconoció su alegría por ser nombrado pregonero y se mostró con gran responsabilidad ante el envite. Martín adelantó parte de su trabajo que espera esté al nivel que requiere la Semana Santa que tanto vive y aprecia. El apoyo de su Cristo de los Favores y la ayuda de sus nietos son para él claves en el cometido que le espera.
También con emoción recibió el encargo la pregonera infantil, Ángela María Cuevas. La pequeña enumeró sus grandes pasiones cofrades y sus profundas raíces cristianas. Arropada por sus familiares se mostró muy segura en su primer acto representando al futuro cofrade de Loja. Cuevas reconoció para su familia había sido un regalo su nombramiento, el cual nunca pensó que le fuera a suceder.
El acto estuvo lleno de momentos musicales. Se contó con la participación de los violinistas Francisco e Ismael Espejo que interpretaron las marchas Amargura y Miserere. También la guitarra tuvo protagonismo con la marcha La Saeta, interpretada por José María Fuster y Diego Guardeño, siendo justo al final de la misma cuando se descubrió el cartel anunciador.