Con el objetivo de mejorar y embellecer el casco histórico de Loja, el área de Urbanismo del Ayuntamiento de la ciudad, a través del Plan de Fomento de Empleo Agrario (PFEA), acomete estos días la reforma del firme empedrado de la calle Gallego Burín, que une mediante una escalinata la calle de Las Tiendas y Duque de Valencia con la plaza de la Virgen. “Estamos reformando esta calle porque con el paso de los años y diversas obras han deteriorado el firme de empedrado granadino”, explicó el concejal de Urbanismo, Joaquín Ordoñez, durante su visita a las obras.
A esta actuación se le unen otras intervenciones similares, dentro de este programa del PFEA, como son la reparación de barandas y el pintado de zonas degradadas que cuentan con una inversión total de 90.000 euros, principalmente, destinados a mano de obra.
Además de la reforma del pavimento en esta calle céntrica de Loja, el edil informó sobre otros futuros trabajos de mejora en el empedrado de la zona de La Alcazaba y del nuevo acceso a la ermita de San Roque. “Una inversión en el casco histórico con el objetivo de mantener nuestras construcciones antiguas y en eso vamos a seguir invirtiendo, tanto con el PFEA como con recursos propios que tiene este ayuntamiento”, aseguró.
Por su parte, el alcalde de Loja, Joaquín Camacho, aludió a que se trata de una actuación muy importante porque una de las prioridades del actual equipo de Gobierno es “invertir recursos económicos municipales con el fin de mejorar las zonas turísticas en el casco histórico” y se plantean alternativas desde el Ayuntamiento para el mantenimiento de zonas históricas como las del barrio de La Alcazaba.
“Llevamos varios años incorporando este tipo de memorias en el PFEA, estamos planteando varias alternativas desde Ayuntamiento para el mantenimiento de estas zonas, principalmente, en el barrio de La Alcazaba, la plaza Nazar y Reloj. Tenemos la obligación de la conservación de nuestro patrimonio y también del mantenimiento de nuestros viales”, apuntó.
Sobre la actuación que se ejecuta en la baranda de la calle Granada hasta la plaza de La Victoria, el regidor lojeño explicó que “la intención es garantizar la seguridad vial en esa zona, cambiando el paso de peatones que hay entre La Victoria y la primera acera de la avenida de Los Ángeles”.
Esto se suma a todas las actuaciones de mejora que se han hecho en las dos entradas a la ciudad, el Taxi y el Manzanil, y que se continuará en las próximas semanas con el embellecimiento de la zona de la piscina Yola. “Se va a adecentar y se va a poner una marquesina para que los viajeros se resguarden de las inclemencias del tiempo, sabiendo que es una parada y que no es la estación de autobuses por la que vamos a seguir luchando”, subrayó Camacho, junto a los maceteros y trabajos de jardinería.
Con el objetivo de hacer una ciudad más habitable y atractiva para el visitante que genere más oportunidades de desarrollo, concluyó el alcalde.