El salón de actos del Poniente Granadino acogía este pasado martes una charla con motivo del ‘Año Internacional contra la Violencia de Género’, organizado por la Secretaría de Igualdad de la Agrupación Socialista Lojeña. A la actividad asistieron numerosas personas, que tuvieron oportunidad de conocer los protocolos de actuación en los casos de violencia de género y desde las diferentes áreas implicadas en un proceso de este tipo: médica, policial y jurídico y asistencial.
Para ello se contó con la participación de Elena Ortiz, subinspectora jefa de la Policía Local de Loja, Isabel Abadía, concejala del PSOE y abogada y Gracia Castillo, doctora en medicina.
El acto contó también con la presencia del secretario general del PSOE lojeño, Juan Francisco Mancilla, así como de la secretaria de Igualdad, Juana Mancilla. El primero fue el encargado de abrir la jornada y, tras agradecer a las tres personas encargadas de impartir las ponencias, señaló que la violencia de género “es una lacra que tenemos que erradicar entre todos y sólo con la implicación de cada uno se puede llegar a conseguir”.
Juana Mancilla, por su parte, señaló que el PSOE siempre ha luchado contra la violencia de género, destacando la puesta en marcha de la primera Ley Integral contra la Violencia de Género, y, ya en Andalucía, se establecieron otras dos, una Ley de la Igualdad y otra de Promoción de la Igualdad y Prevención de la Violencia de Género.
Así, para la secretaria de Igualdad del PSOE, “no debemos permitir que se recorte un solo céntimo en violencia de género e igualdad”.
Tras su intervención se dio paso a las diferentes ponencias. En primer lugar fue Isabel Abadía, como abogada, quien comenzó refiriéndose a las denuncias falsas. En ese sentido, señaló que, pese a la opinión generalizada de que existen muchas denuncias falsas, “sólo un 0,01% de todas las que se realizan, lo son”. Habló también sobre el perfil del maltratador, señalando que “no existe un patrón o perfil, pero sí hay uno que se repite, que es el ciclo de la violencia. Hay siempre una fase que es la conocida como ‘luna de miel’, de arrepentimiento por parte de la persona que maltrata, pero luego se repite”, dijo.
Isabel Abadía también habló de aspectos como la orden de protección, que se puede obtener en 72 horas desde que se presenta la solicitud. Destacó también que “hay un antes y un después desde la puesta en marcha de la Ley de Igualdad, ya que existen recursos para las víctimas de la violencia de género, a pesar de que hay deficiencias”.
Por último, señaló que lo peor para la víctima es “denunciar y luego echarse atrás. Es muy duro dar el paso y, desde luego, no que no se puede hacer es cuestionar a quien denuncia, como ocurre muchas veces”. Además, dijo que “los datos no mejoran, cada vez hay más casos de malos tratos y a edad más temprana”.
La subinspectora jefa de la Policía Local, Elena Ortiz, dijo que “se ha avanzado mucho en esta materia, pero hay que seguir” y puso el acento en que “se trata de un problema de educación, está en los principios y en la base. Tenemos que creernos que todos y todas tenemos los mismos derechos y libertades y compartimos las mismas obligaciones, pues en el momento en que eso no nos lo creemos, estamos cayendo en violencia de género”.
Centrándose en el ámbito local, Ortiz recordó que en el Ayuntamiento de Loja se creó la Comisión de Seguimiento Local de la Violencia, en la que participan todas las instituciones que abordan esta materia, y que se reúnen periódicamente. En cuanto al trabajo de las fuerzas y cuerpos de Seguridad, en el caso de Loja, se trata de la Policía y la Guardía Civil, quienes actúan en tres ámbitos: prevención, intervención y protección.
Como recordó Elena Ortiz, en la jefatura de Policía de Loja se encuentra el arresto de detenidos de todo el partido judicial. Según los datos que aportó, el pasado año ingresaron 79 personas, de las cuales 36 fueron por delitos de violencia de género.
Por último, sería la doctora Gracia Castillo, quien centraría su intervención en el punto de vista médico. Definió la violencia de género como “lo peor que le puede pasar a una mujer”.
Según destacó, hasta 1993 la Organización Mundial de la Salud (OMS) no definió la violencia de género y “tras darse cuenta que había mucho sufrimiento detrás de muchas mujeres, decidió definirla como un problema de salud público”. A partir de ahí, destacó, se ha avanzado mucho “porque se trata como un problema de salud. Posteriormente, a partir de año 96 se empiezan a hacer protocolos de actuación, tanto a nivel de salud, como educación y otros ámbitos. La Ley de 2004 sobre Violencia de Género, a nivel nacional, y de 2007 a nivel andaluz, son las que establecen las medidas de intervención y protección integral, que son las referentes para abordar la violencia contra la mujer”.
Como recordó Gracia Castillo, existen tres formas de violencia de género: psíquica, física y sexual. Ante todo ello, dijo, “los médicos tenemos que detectar un posible caso de violencia de género para poder actuar, para poder ofrecer una atención sanitaria integral”.
Además, destacó que, pese a la opinión generalizada, el maltrato no tiene por qué ir asociado a las drogas y el alcohol. También resaltó los casos, cada vez más frecuentes, en parejas jóvenes y el repunte de la violencia relacionada con las nuevas tecnologías.