Consternación y duelo de buena parte de la sociedad lojeña por la repentina muerte de Paco Moya Muñoz. Reconocido nadador pero mayor persona, dada su solidaridad, nos deja muy joven, a los 48 años de edad. Amigo de sus amigos y respetuoso con todos los que lo conocían, Moya deja un ejemplo de vida dada en la defensa de los más necesitados y vulnerables.
Baluarte de Cruz Roja Loja desde hace años, trabajaba como técnico en la ONG, siempre defendió el avance del municipio en la ayuda a diferentes colectivos necesitados de apoyo. Siempre alegre y desinteresado, ha defendido la labor de la ONG en sus diferentes ámbitos, tanto en su trabajo con los más excluidos como en los programas con menores o mayores.
Su versión como deportista se unía a sus inquietudes sociales. Fue doble bronce en el Campeonato de Andalucía de Invierno de Natación en el 2016. En julio de 2018 culminó uno de sus retos, cruzar el Estrecho a nado dentro de su proyecto solidario ‘Historias de Vida en el Agua’. También recorrió otras importantes maratones en el agua siempre para diferentes causas solidarias. Nunca abandonó su pasión por la natación.
Desde los medios de comunicación locales nos unimos al dolor de la sociedad lojeña por esta pérdida y damos nuestro más sentido pésame a sus familiares y amigos.
Fallece el solidario y deportista lojeño Paco Moya
El técnico de Cruz Roja Loja nos ha dejado en la tarde del 30 de diciembre a los 48 años de edad dejando una impronta personal llena de valores de defensa por los más necesitados y vulnerables
Se ha ido una grandísima persona.
Un lojeño de los que merecen un reconocimiento.
Siempre te recordaremos, Paco. :_(
Paco es imposible expresar en palabras lo que hiciste en un solo de tu vida. Tu has sido la persona más humana, mas cercana, mas solidaria que hemos tenido a nuestro lado. Tu sonrisa, tus palabras nos dieron mucho pero tus actos, tu forma de manejar los problema, de ayudarnos a todos sin preguntar, sabiendo siempre qué era lo que había que hacer… creíamos que teníamos derecho a que permaneciera aquí con nosotros durante un tiempo infinito. Y mira. Qué pronto te vas.
Una triste pérdida, la de una persona excelente con mayúsculas.