Las obras del AVE a su paso por Loja ocuparon parte del debate de los corporativos en el pasado Pleno Municipal. Mediante una moción de urgencia elevada por Alcaldía se pretendía recordar al Ministerio de Fomento las alegaciones al proyecto de adaptación de la vía actual que se aprobaron en marzo de 2014, con la unanimidad de los grupos, con el objetivo de que “no se perdiera ningún paso a nivel en la ciudad”. Así lo expuso el alcalde Joaquín Camacho, quien defendió esta nueva iniciativa “para que las obras se hagan lo mejor posible y no perjudiquen a la calidad de vida de los vecinos”.
En detalle, con estas alegaciones se pide que se conserven o mejoren los pasos a nivel previstos en el proyecto. Es el caso del que existe en el paraje del Puente Barrancón –ya solventado- o el de la Loma de las Alegrías. En este último caso, los alcaldes de Loja, Algarinejo y Zagra pidieron conjuntamente por escrito que se garantizara este paso “esencial para el desarrollo del Poniente Norte”.
La petición municipal también incluía que se mejorasen los pasos previstos en el barrio de Estación. Por un lado, que el peatonal planeado en torno al apeadero sea elevado en vez de subterráneo. También que el paso para vehículos previsto incluya un acerado para el tránsito de peatones.
El paso de La Esperanza-Las Peñas también está incluido en estas alegaciones. Dice el alcalde que es indispensable para garantizar el acceso a los vecinos de esta zona residencial y también para la piscifactoría allí instalada. Aparte de estas cuatro peticiones, se acordó incluir una más, que el puente que cruza las vías en Plines por los Jardines de Narváez se ensanche y se mejore, incluyendo la acometida de canalizaciones.
Según Camacho, el ministerio está “abierto” a escuchar estas propuestas, argumentando que le causó “buena impresión” la visita a Loja del titular de Fomento, Íñigo de la Serna, el pasado mes de febrero. “El ministro conoce plenamente el proyecto y las peticiones de los vecinos”, dijo en la sesión.
El PSOE no ve con buenos ojos ninguna de estas alegaciones. Según su portavoz, Juan Francisco Mancilla, estas objeciones deben hacerse “a la mayor” porque “no hay ni un solo vecino que esté de acuerdo con esta chapuza que nos están imponiendo”. La única alegación posible a tenor de Mancilla es que se defienda la Variante Sur por la Sierra de Loja, “fundamental para el desarrollo futuro de la ciudad”. Una solución que reconoció sería “más costosa, pero más segura y cuenta además con todos los informes técnicos y medioambientales a favor”.
Añadió Mancilla que su grupo no iba a apoyar algo “en lo que no creemos, que está generando importantes destrozos en Plines y que transcurre por mitad de Loja por una vía del siglo XIX”.
RESPUESTA DEL EQUIPO DE GOBIERNO
Al día siguiente de esta sesión plenaria, el equipo de gobierno ofreció una rueda de prensa para valorar el Pleno y, sobre todo, para afear al PSOE que no hubiera apoyado las alegaciones “cuando en 2014 sí lo hicieron”. El concejal de Urbanismo, Joaquín Ordóñez, se mostró “sorprendido” por la posición de los socialistas. Les dijo que aunque estén en contra de esta obra “es muy difícil que no se realice y por ello debemos estar vigilantes para que se respete el mayor número de pasos a nivel”.
Para el alcalde Joaquín Camacho lo que toca ahora es “bajar a la realidad” y atender “lo que los vecinos nos piden, que es solucionar los problemas que puedan surgir por las obras del AVE”. Según el regidor, en la moción elevada a Pleno “no se habla de confrontación política, sino de que se garanticen los pasos a nivel y el desarrollo de la piscifactoría”. Camacho dijo no defender al Gobierno de España, “sino a los vecinos, para que la obra tenga la mayor garantía para ellos”.