La Real Feria Grande de Loja ha vuelto a contar un año más con festejo taurino. La plaza portátil ubicada al lado del puente Aliatar ha contado con una novillada con la participación de cinco aspirantes a toreros. Medio lleno para una edición que ha contado con mejor suerte por parte los novilleros, dos de ellos salieron a hombros por la puerta grande.
El cartel ha contado con importantes referentes de la tauromaquia pujante de Andalucía. Ha comenzado Rafael Fandila Fernández, de la escuela jienense, con un novillo manso que no le ha facilitado su trabajo. Consiguió una oreja al no estar acertado en ninguno de los tercios, pero buscar exprimir todas sus opciones.
Más ha mostrado el almeriense Fran Lupión con un novillo más activo dentro de la debilidad de reses de poco más de un año de vida. No estuvo fino en el tercio de banderillas, pero acertó en la suerte de matar. Repitió como el año pasado con dos orejas y el rabo.
Poco acierto de la faena de Martín Mendoza, granadino, que no contó con oportunidades con el capote y no embistió el novillo por ninguno de los dos pitones. Aviso de la presidencia en la suerte de matar.
Tampoco sacó más de sí, Cristian Pedrosa ‘El Mini’, también de la escuela granadina. Parecía que podía aprovechar más al novillo, menos flojo que otros de la tarde, pero decidió terminar con premura sin suerte.
El cierre fue para El Abarrate, de Atarfe. Más veterano que el resto trabajo bien al novillo. Se gustó con las banderillas acompañado de Lupión. El no estar acertado en la muerte le evitó contar con el rabo. Aún así salió a hombros junto con Lupión.