Loja vivió anoche el pistoletazo de salida oficial al Carnaval de este año 2019. Con el Teatro Imperial, escenario de tantos y tan grandes momentos del carnaval lojeño, como testigo de excepción y un patio de butacas completamente lleno para la ocasión, arrancó casi un mes de actividades marcads por esta fiesta, la de don Carnal, que impregnará a lo largo de los próximos días a la ciudad de este ambiente tan especial.
Así que había ganas, como no, de comenzar esta fiesta, que tenía como principal ingrediente el pregón oficial de este año, secundado por la entrega de la ‘Máscara’ del Carnaval y el Antifaz de Oro.
El encargado de presentar el acto fue Manolo Écija, quien dio paso al presidente de la Asociación Lojeña de Carnaval, Rafael Ramírez, al vicepresidente, Juan Francisco Cañadas, y a su secretaria, Rocío Ortíz Guardeño. Ramírez manifestó la satisfacción de la asociación por el inicio del carnaval. “Llevamos años trabajando duro, porque nos pusimos una meta, que en el año 2020 teníamos que tener un carnaval grande, con el inicio de la Escuela de Carnaval, que permita que el próximo año tengamos grupos de niños de nuevo en el escenario y llenando las calles”. El presidente agradeció el trabajo de los anteriores integrantes de la asociación, desde que se echó a andar en el año 95.
Por su parte, Juan Francisco Cañadas, dio paso a los ganadores de la Máscara y el Antifaz. En el caso de este último galardón, hay que recordar que lo elige la Asamblea de Antifaces, compuesta por los anteriores ganadores de esta distinción, que reconoce una trayectoria, sobre todo en lo que a agrupaciones se refiere. Por su parte, la Máscara es un elemento característico del carnaval de la calle, que eligen tanto la comisión como la propia asamblea de antifaces.
Fue así como se llamó en primer lugar a Emilio Padilla Pérez ‘Pío’, para entregarle la ‘Máscara’ de este año, que recogió con mucha emoción y agradecimiento. “Para mí esto es como si recogiera un Goya y es la primera vez que recojo un premio por algo que hago por divertirme y pasármelo bien”, dijo Emilio Padilla, quien recordó que “desde pequeño salió en agrupaciones, junto a su hermano, acompañando a La Peña de La Orza”. Ya de mayor formó parte de la Comparsa Cultural Lojeña “donde empezamos a aprender el carnaval de agrupación”. ‘Pío’ recordó también el pregón que realizó allá por el año 2007 y la recuperación del Entierro de la Sardina y la puesta en marcha del Domingo Teoletero. También reivindicó el carnaval de calle y el disfraz y la máscara, destacando la importancia de “meterse en el tipo en el momento en el que sales a la calle”. Por supuesto, hizo mención a ese personaje tan carismático creado por él mismo, como es el alcalde del Barrio Alto. Para concluir animó a todos los lojeños a disfrazarse y participar del carnaval.
Seguidamente se dio paso a la entrega del Antifaz de Oro, que este año ha recaido en Fernando Maíz Luna. Tras imponérsele esta distinción, el protagonista agradeció a su familia, amigos, compañeros de agrupación y a Pepe Maroto “que fue mi maestro en esto”. Su agrupación le dedicó un pasodoble, realizado expresamente para él, que emocionó a Fernando Maíz.
“HACER UN PREGÓN ES COMO HACER UN BUEN GUISO”
Y seguidamente se dio paso al esperado pregón de Carnaval, encargado este año a José Manuel Sánchez, ‘Chupi’, como todos conocen al actual concejal de Fiestas. José Manuel Sánchez comenzó su pregón, sí, pero no era un pregón de Carnaval, ¡sino de Feria!. Así que sobre el escenario aparecieron Kiki Corpas con su guitarra y Elena López ‘La Sensa’ interpretando y bailando unas sevillanas.
El pregonero da la bienvenida a todos los presentes y, ante la sorpresa de todos, comienza a anunciar la Feria Grande, mientras Kiki Corpas y ‘La Sensa’ continúan con la música y el baile. Es el momento en el que aparece una voz que altera al pregonero, quien pregunta ¿quién eres?. Entonces se escucha la voz de ‘Peque’, compañero de la agrupación a la que perteneció durante años José Manuel Sánchez. Se enciende una luz cenital hacia el escenario que deslumbra al pregonero apagando tenuamente el resto y Peque le anuncia que estamos en febrero y que lo que ahora toca es el carnaval y le da unos consejos para desarrollar el pregón.
Así que, tras el simpático preámbulo, comienza el pregón de Carnaval y el protagonista vuelve a saludar y felicita también a los dos premiados de la noche, Emilio Padilla ‘Pío’ por la Máscara y Fernando Maíz por el Antifaz. Tras agradecer a la Comisión de Carnaval su elección para realizar el pregón, Chupi señala que “hacer un pregón es como hacer un buen guiso… con unos ingredientes y sobre todo cocinarlo todo lentamente…, así que saca una mesa, varios utensilios y hasta un horno, junto a los ingredientes necesarios para hacer un bizcocho. “Los primeros ingredientes son la historia personal de uno, de como va todo fraguando en la vida de uno para llegar a ese año 2007 que es el comienzo carnavalero de este pregonero”, señala José Manuel Sánchez, quien, mientras comienza a preparar ese bizcocho, va haciendo un recorrido por su trayectoria y vivencias con el carnaval, recordando que su relación comienza, junto a su hermano, en el carnaval infantil.
Pero es en el año 98 cuando el ritmo del 3×4 entra en su vida de forma más fuerte, especialmente gracias a la figura de Martínez Ares. “Era el año de Los Piratas y todos estábamos maravillados de esta comparsa. “Las rumbas y esos tanguillos iban entrando en mi cabeza y hace que uno se enganche definitivamente”.
En ese recorrido por su relación con el carnaval, el pregonero señala que el carnaval, y especialmente el gaditano, va a entrando cada vez con más fuerza en su vida. Mientras, en Loja seguía el concurso, pero le gustaba participar en el carnaval de calle, disfrazándose. “Loja era conocida por sus máscaras, sus coros que estaban tres días desfilando tocando bandurrias, laúdes…”. Confesó que el disfrazarse le viene de una tía suya a la que le encantaba disfrazarse. “Con el primer trapo que viese, ella se lo ponía, así que era algo fácil para mi, era algo cotidiano”. Por eso, reivindicó el carnaval de calle y las máscaras “que siempre tienen que estar presentes, al igual que esas agrupaciones callejeras, que también son la esencia de ese carnaval más canalla que tanto nos gusta a muchos carnavaleros”.
José Manuel Sánchez se va poco a poco metiendo en el carnaval de agrupaciones. “El ir a verlo al Imperial suponía alimentar más esas ganas”, así que fue en 2007 cuando, por fin, dio el primer paso que, un año más tarde, fue definitivo al concurso. Recordó su primera chirigota que, en principio, era una despedida del carnaval de ‘Capelo’ y Pelayo, “pero que, posteriormente, fue el impulso para ellos y muchos de nosotros, pues el año fue perfecto, no sólo por la gran unión, sino también por ese espíritu de reivindicación que caló en muchos de nosotros”. Todo ello, según el pregonero, supuso también el cambio en la modalidad, con letras más comprometidas y seriedad. Es el momento en el que aparece la chirigota que actúa para el público con un pasodoble.
A partir de ahí recuerda todos los tipos de los años siguientes, con ‘Los Musalmanes’, ‘Homos en Manteca’… hasta llegar al 2015 con ‘Los Dominadores’, el último de experiencia carnavalera de José Manuel Sánchez antes de centrarse ya en su labor como concejal en el área de Fiestas.
Desde ese perfil de concejal “que me hace cambiar muchas cosas y verlas de otra forma”, simuló una llamada del alcalde preguntando si estaba todo preparado para la actividad carnavalera del día siguiente, con la ‘Rosconá’, y la agrupación vuelve a aparecer en el escenario para cantar el cuplé de la vida mejor del alcalde y el concejal.
En esa visión desde la organización, pidió a todo el mundo del carnaval que “arrime el hombro”. “Quiero una asociación llena de manos y de cabezas con grandes ideas y que sea la que organice, como lo hacía antes, nuestro carnaval, que la comisión sea un órgano consultivo y de seguimiento, que no desaparezca, pero que sea quien nos mire de reojo y poniendo orden cuando sea necesario; un carnaval infantil con todos esos grandes maestros lojeños participando y que hagan resurgir la afición en los niños, quiero que cuando llegue este concurso y el pasacalles, tengamos miles de voluntarios -bueno con unos pocos me conformo- y quiero que todo no sea a última hora o improvisando y, por supuesto, quiero escuchar en los descansos, entre agrupación y agrupación, La Colombina”. Es el momento en el que aparecen integrantes de la Banda de Música, que interpretan esta popular canción.
El pregonero, que ya hacía bastante tiempo había dejado por imposible su bizcocho, acabó la noche en un tono reivindicativo y de alabanza al Carnaval de Loja.
“Tenemos los nervios, tenemos amigos…
Tenemos Serenos cantando en el Falla…
Tenemos los niños que darán nuestros coles…
Tenemos Castores y a Enrique Moncada…
Tenemos las ninfas, Rojano y Fran Costa…
Tenemos recuerdos de Los Follapavas…
Tenemos la radio, la tele de Loja…
Tenemos jurados… Que siempre nos fallan!!!
Tenemos domingos en el Barrio Alto, tenemos cochera en Casa Montoro…
Tenemos la murga de los jubilados, los pitos de caña, los pines de oro…
Tenemos las noches de enero sin Champions…
Y una guerra fría en el Carnavalillo…
Tenemos las peñas La Orza y El Taco…
Tenemos la juerga en el Bilbaíno!!
Tenemos la gracia de Paco Frasquito, tenemos la frase: A que no me conoces???!!
Los pregones llenos, pasacalles vacíos… Tenemos alegrías… En los corazones…
Tenemos las truchas que arden en Cuaresma, tenemos en Cádiz a un fugitivo…
Tenemos la cara pero no careta…
Y un alma en oferta… Que nunca vendimos!!
Tenemos mujeres en murga y comparsas, a Rojos, Murillo, Pablo sola, pegasaltos, maria la garduña que siempre estarán escuchando, y tenemos las letras con aire canalla, la sangre sabor teoletero de Pelayo y Capelo…
Y por supuesto tenemos muchos ingredientes para seguir avanzando y ser referentes en la provincia y en toda Andalucía Oriental… no ser Cádiz ni Málaga, sino Loja, la que tanto ha dado al carnaval con sus máscaras y su concurso pero, sobre todo, con su teoletero, el barrio Alto y su alcalde, sus gentes…