El escenario no era el verde de la Venta del Rayo pero tampoco el salón de nuestra casa como el pasado año. Desde hace más de 30 años cada 1 de mayo Loja se llena de amistad con su romería. En esta ocasión, y por segunda vez de forma consecutiva, la comitiva no acompañó a San Isidro hasta la explanada de esta pedanía.
La Iglesia de Santa Catalina recuperó algo del fervor de la tradición de la Romería de la Amistad de Loja. Lo hizo con la celebración de la Santa Misa en honor a San Isidro. A las 11 horas tuvo lugar esta Eucaristía que contó con la presencia de la mayoría de los miembros de la Peña Dinámico, asociación organizadora junto con el Ayuntamiento de este peregrinar. El alcalde de Loja, Joaquín Camacho, y la concejala de Fiestas, Rocío Ortiz, estuvieron presentes.
Manuel Molina, sacerdote de esta parroquia, celebró el acto religioso que estuvo también amenizado por cantos rocieros. Durante la misma se pidió por los fallecidos de la pandemia, teniendo especial mención por aquellos que pertenecían a esta peña. También se deseó que el próximo año se pudiera recuperar esta tradición que en los últimos años albergaba a más de una treintena de carrozas y más de un centenar de participantes.
La foto de familia de todos los miembros de la peña y asistentes en general al final de la eucaristía puso el final a una mañana repleta de sentimientos. Desde la Peña Dinámico se destacó que después de un año tan complicado con esta misa se recupera algo de normalidad y se vuelve a ver la unidad de esta asociación. También se entiende todo esto nos servirá para apreciar más los buenos momentos vividos y los que nos quedan por vivir.
ESCRITO PEÑA DINÁMICO:
¡Ayer la sentí!
Sí, ayer 1 de mayo, Día de los trabajadores y de nuestra Romería de la Amistad, en honor de San Isidro Labrador, sentí “la normalidad” y el cómo vamos a entrar en ella.
Después de un año de pandemia y de todo lo que hemos y estamos viviendo, he llegado a la conclusión de que a partir de ahora, sabremos saborear cada instante de nuestras vidas.
En la iglesia Santa Catalina vivimos un momento precioso. Allí estaban todas y cada una de las personas, que hemos perdido durante la pandemia, junto a las que siguen formando parte de nuestras vidas: familiares, amigos y vecinos. ¡Allí estaban! escuchando las palabras de nuestro párroco y cantando la salve rociera, que tantas veces nos ha puesto “los pelos de gallina”.
Fueron unos instantes, pero muy intensos. Después, no había carrozas, ni recorrido, ni música, pero sí, alegría y esperanza al reunirnos con nuestra familia. ¡Eso hemos aprendido a valorarlo muchísimo!
El próximo año, podremos realizar todas esas cosas y saborear “la normalidad”. Volveremos a estar en la iglesia y en el paraje que el ayuntamiento nos asigne. El lugar no es importante, pero sí las personas.
Volveremos a ver a los miembros de la peña Dinámico organizando y velando por sus vecinos, los colores de los vestidos de gitana, las risas de los niños y sobre todo esas sonrisas, no sólo en los ojos, sino en los labios. Volveremos a saludarnos, aunque “ese saludo” va a ser diferente porque lo vivido en este tiempo “nos ha hecho mella” y creo, que para bien.
¡NOS VEMOS EN LA ROMERÍA DE LA AMISTAD!
¡Viva San Isidro! ¡VIVA LOJA!
Conchi Pérez
