Una hilera de pequeñas luces blancas y amarillas intermitentes alerta desde hace unas semanas a los conductores que transitan por la avenida Pérez del Álamo de la necesidad de reducir la velocidad y frenar ante la cercanía de un paso para peatones. El área de Gobernación del Ayuntamiento de Loja ha instalado estos elementos en seis puntos de este vial con el objetivo de llamar la atención de los conductores y reducir el riesgo de accidentes.
Estas balizas identifican los cruces de alta peligrosidad, bien por la falta de visibilidad o porque las condiciones de la vía se presten a una mayor velocidad de circulación. “Se ha escogido esta vía, desde la rotonda de la Piscina Yola hasta la rotonda del puente nuevo, porque según nos informaba la Policía Local tiene mayor tránsito de vehículos y eso puede generar más peligrosidad para los peatones que deseen cruzarse de acera”, precisó el alcalde, Joaquín Camacho.
Gobernación seguirá mejorando la seguridad en los pasos de peatones e instalará también estos elementos lumínicos en el centro histórico, en concreto en la plaza de la Constitución y la carrera de San Agustín, en sendos pasos para peatones “que poca gente identifica a pesar de existir señal vertical”, apuntó Camacho. En estos casos, el Ayuntamiento se verá obligado a reemplazar parte del adoquinado por otro material para poder pintar la señal que delimita el paso, ya que “el adoquín de esta zona histórica absorbe la pintura”, explicó el regidor lojeño.
El Ayuntamiento también procederá en los próximos días a eliminar barreras arquitectónicas, en una primera fase, en los pasos de peatones del centro histórico, desde la plaza de la Constitución a la glorieta de los Ángeles.
