Francisco Javier Joyera Castro, más conocido por ‘Frasco’, es, sin duda, uno de los personajes que ya forma parte de la vida cotidiana de Loja. Su buen humor le permite acercarse al ciudadano al que convence para que cada día decida jugar al cupón de la ONCE. Esa capacidad para la venta, pero, sobre todo, su manera peculiar de comercializar su producto, han servido para que se le reconozca como `Vendedor del año, tanto a nivel nacional como de la delegación de Zona de Granada.
Con 23 años, a Francisco Javier Joyera Castro, un accidente de tráfico le cambió su vida. “Fue un sábado por la tarde y yo volvía para mi casa después del trabajo y en un adelantamiento de un vehículo a otro me atropellaron y acabé perdiendo una pierna. Durante tres años los médicos intentaron salvarla, pero no pudo ser, debido a la infección que tenía por dentro, así que no hubo más remedio que amputar, porque llegó un momento en el que ya me dijeron que peligraba mi vida”.
Frasco lo dice ahora con mucha naturalidad, pero hay que imaginarse el momento. Eso sí, durante esos tres años él se fue concienciando y preparando para lo peor. “Un accidente así es algo que no te esperas y no te explicas y te encuentras con esto de un día para otro. Recuerdo que llegué muy mal al hospital y que trataron por todos los medios de mantenerme despierto para que no entrara en coma. Al día siguiente me encuentro con la pierna llena de aparatos por todos sitios, tanto en el fémur, como la tibia y el peroné, pero al menos tenía mi pierna y, sobre todo, podía decir que estaba vivo. Y la verdad es que desde el primer momento los médicos me dijeron que podía perder la pierna, así que me fui preparando para ello y después de muchas operaciones, curas muy fuertes, injertos de hueso, masa muscular y piel, yo me fui concienciando y preparando para lo peor, hasta que se confirmó”.
Francisco Javier Joyera sale, pues, con 26 años, después de todo ese tiempo, y se encuentra con un momento trascendental en su vida: qué hacer a partir de entonces. “No tenía estudios y me encuentro que me cambia totalmente la vida, porque no sabía qué hacer en ese momento, aunque tengo dos familiares con discapacidad y que son afiliadas a la ONCE, así que me hablaron de esta organización. Entonces me dijeron que tendría más posibilidades de entrar si tenía el carné de conducir, así que me lo saqué, me compré un coche y presenté los papeles y a la semana me llamaron de Granada para una entrevista y a las dos semanas estaba trabajando”.
Precisamente, ahora se cumplen 13 años desde entonces y Frasco se encuentra muy agradecido a la ONCE. “La verdad es que esto me dio la vida, porque yo no sabía qué hacer y aquello me abrió las puertas al mundo”.
Está claro, por tanto, que esta organización le dio una oportunidad a Francisco Javier, pero también es cierto que él la ha sabido aprovechar, como confirman los reconocimientos que ha tenido ahora a nivel de la delegación de Zona y nacional. “Pienso que he sabido aprovechar esta oportunidad y la verdad es que cada día estoy más orgulloso y satisfecho por tener este trabajo y cada día intento aprender un poco más. Esto es algo que yo no lo escogí, me vino por unas circunstancias de mi vida, pero, como te digo, lo he aprovechado y me siento cada día más valorado y más querido”.
Como él dice, la ONCE le ha dado mucho, pero Frasco también ha devuelto mucho a ella. Y por eso, llega ahora este reconocimiento en forma de premio, con el concedido como mejor vendedor del año 2015 por parte de la delegación de zona, que incluye a Granada, Jaén y Almería, así como el obtenido a nivel nacional en Madrid, junto con otros 21 vendedores de toda España. Joyera confiesa estar muy orgulloso y agradecido por ello. “La verdad es que me siento muy orgulloso y cada vez más profesional, pues no sólo es el cupón, sino que llevamos actualmente hasta 29 productos y para ello hay que ser más profesional cada día”.
Frasco dice que ha disfrutado mucho en ambas galas, tanto la vivida en Granada como la más reciente en Madrid. “Yo esto no me lo esperaba, me lo confirmaron en Granada en una comida del Comité y la Ejecutiva y la verdad es que me emocionó mucho, porque ser el mejor de entre más de 1.000 vendedores en la delegación, es algo muy importante. Y lo mismo puedo decir de Madrid, donde soy uno de los 22 elegidos entre unos 20.000 de toda España. Todo ha sido muy especial y emotivo y estoy muy agradecido”.
A Madrid ha acudido con una sobrina suya, Mª Piedad Joyera, que es afiliada a la ONCE y que, según señala, “me hacía mucha ilusión que pudiera acompañarme”.
Ya son cinco años trabajando en el Hospital de Loja, donde Frasco vende sus productos toda la mañana y completa la jornada después en los bares de Loja. El conocido lotero lojeño destaca por su forma de vender, que le hace ganarse el cariño de todos sus clientes. “Está claro que es muy importante cómo se vende, todo ayuda y es importante saber escuchar a la gente y lo que hay que decirle a cada uno y, sobre todo, con una sonrisa en la boca. La verdad es que soy muy extrovertido y siempre estoy contando chistes y tratando de hacer reír a la gente”.
Eso sí, Francisco Javier Joyera confiesa que lo que más desea es dar un gran premio. “He dado las cuatro cifras varias veces, pero todavía no he dado un premio gordo y la verdad es que estoy deseando hacerlo. Ver la cara de satisfacción de tus vecinos cuando das un premio no tiene precio, por eso, yo me levanto todos los días con la ilusión de dar un gran premio y espero hacerlo muy pronto”.
