El Área de Juventud ha desarrollado durante el verano tres cursos formativos, en los que ha participado un centenar de jóvenes lojeños. Se trata de propuestas de formación no reglada que han versado sobre monitor de aula matinal, monitor de campamentos e iniciación a la lengua de signos. Unas temáticas que han sido elegidas por los propios participantes tras realizarse una votación para elegir las que más les interesaban. Así lo ha puesto de manifiesto la concejala de Juventud, María Ramos, durante el acto de entrega de diplomas celebrado este miércoles en el patio del Palacio de Narváez.
El primero de los cursos en celebrarse, a mediados de julio, fue el de monitor de aula matinal. El segundo, el de lengua de signos, se desarrolló la semana siguiente, y el último, el de monitor de campamentos, las tres semanas posteriores. Éste último curso se ha tenido que realizar en tres turnos debido a su alta demanda.
En el acto de entrega de diplomas estuvo presente Juan Francisco Cañadas, monitor del curso de lengua de signos, una materia que, dio, “aunque menos dinámica que las otras, también ha tenido una gran demanda”. Cañadas espera que a sus alumnos les sirvan los conocimientos aprendidos sobre la lengua de signos que “sirve para transformar la forma de ver la vida”.
El alcalde lojeño, Joaquín Camacho, destacó la participación de estos jóvenes en la elección de la temática de unos cursos que, añadió, “les ha proporcionado herramientas para su primera inserción laboral”. Además, se marcó el objetivo de que estos cursos tengan una certificación oficial, para que puedan contar en procesos selectivos u oposiciones.
