La Dirección General de Tráfico ha señalado en rojo 28 vías secundarias de la provincia de Granada que considera que deben ser vigiladas con especial interés. Están incluidas en la actualización de los tramos de carreteras convencionales especialmente peligrosos, en los que el organismo nacional está intensificando los controles con el objetivo de reducir la siniestralidad. En el caso de Loja, la DGT ha incluido la autonómica A-341, que une el municipio lojeño con Ventas de Zafarraya.
Los agentes de la Guardia Civil intensificarán su vigilancia con radares móviles en ambos sentidos de este vial de 34 kilómetros, que comienza en la A-92 y termina en la A-402, en la localidad vecina. En toda su extensión existen numerosas curvas que se combinan con zonas para tomar velocidad, motivo por el que la DGT ha incluido la carretera en su actualización. Desde el ente apuntan que los motivos para señalizar estos tramos como ‘puntos negros’ es el resultado de analizar “el número de accidentes graves, con víctimas mortales o heridos que necesitaron hospitalización; el número de accidentes en general y la información de la velocidad media de circulación en esos tramos”.
Tráfico ha hecho público este listado para pedir a los conductores que se aumente la precaución en estos viales y para avisar de que se podrán establecer radares móviles. Dichos controles de velocidad no estarán ocultos, ya que el objetivo es “que su presencia sirva como medida de disuasión y prevención”. La jefatura provincial no se plantea por el momento incluir en ningún kilómetro de los marcados un puesto de velocidad fijo.
