El Parque del Paseo Público de Narváez fue escenario el pasado viernes de la segunda edición del ‘Día de los Abuelos’, una actividad intergeneracional organizada por el área de Bienestar Social del Ayuntamiento de Loja, en colaboración con las áreas de Deportes y Juventud, la Residencia de Mayores ‘Nuestra Señora de la Misericordia’, los centros de Participación Activa de Mayores y Cruz Roja.
Más de 300 mayores y niños participaron en esta actividad intergeneracional que pretendía reunir a abuelos y niños para jugar juntos a juegos populares antiguos a los niños de hoy cómo se divertían los de antaño. Así, en cada actividad hubo varios monitores abuelos, que fueron los encargados de explicar a los niños en qué consistía cada juego y enseñarles e introducirles en la actividad.
Así, se contó con la presencia de los niños de la escuela de verano del Centro de Atención ‘El Pinar’ de Cruz Roja y otro numeroso grupo de los participantes en los Campamentos de Verano del área de Deportes. En cuanto a los mayores, la actividad reunió a usuarios de los Centros de Participación Activa ‘San José’ del Barrio Alto y San Francisco, así como de los de Ventorros de San José y La Fábrica y de la propia residencia ‘Nuestra Señora de la Misericordia’.
Durante unas dos horas mayores y niños compartieron talleres de abuelitos, instrumentos musicales, chapas, leyendas antiguas, imanes y muñecos, cuentacuentos, juegos de mesa para ejercitar la mente y juegos populares y tradicionales como la rayuela, el trompo, el hoyuelo, las chinas, el pañuelo, el elástico, la petanca, los marros, la píndola, la tángana y la cuarta.
Tras la actividad compartieron un desayuno para acudir posteriormente hasta el complejo de Piscinas Genil, donde pudieron disfrutar del baño, así como baile y animación.
Como destacó la concejala de Bienestar Social, Matilde Ortiz, la intención de esa actividad es “dar a conocer aquellos juegos de los que disfrutaban los abuelos de hoy cuando eran niños y darlos a conocer a sus nietos y los niños del presente”. Ortiz agradeció la implicación y participación de todas las áreas y colectivos que lo han hecho posible.
El alcalde lojeño, Joaquín Camacho, se mostraba muy satisfecho y feliz por la actividad. “Todos tenemos ese recuerdo de nuestra infancia con los abuelos que permanece vivo, porque son como nuestros segundos padres y por eso son fundamentales actividades como esta, que permiten que los niños conozcan los juegos con los que hemos jugado todos y lo han hecho también nuestros mayores”. De paso, añadió que es una buena oportunidad para estrechar relaciones entre abuelos y nietos.
La directora del Centro de Participación Activa ‘San José’ del Barrio Alto, Juana Mancilla señaló que era “un gusto participar en una actividad en la que se celebra un día tan hermoso como el de los abuelos, en el que se respira cariño, alegría y el compartir juegos y tradiciones, algo tan importante que tienen nuestros mayores, que se va transmitiendo de generación en generación”.
Pedro Olid, presidente de la directiva del Centro de Día del Barrio San Francisco, se mostraba emocionado por el desarrollo de la jornada. “Es un día con mucha gente y participación, disfrutando los niños y los abuelos y es algo muy bonito, porque se puede compartir una jornada entre estas dos generaciones”.
Los mayores estaban encantados con la actividad y disfrutaron con sus nietos y los demás niños. Uno de los abuelos participantes señalaba que estaba siendo un gran día y estaban disfrutando mucho. “Es un día fabuloso y estamos muy a gusto” -nos contaba uno de los mayores- que había compartido la mañana con dos de sus nietos.
