“Vaya a donde vayas -reza un dicho bastante popular en Loja- siempre te encuentras a un lojeño”. Sin que esta afirmación sea totalmente cierta, aunque sí bastante curiosa, la verdad es que con bastante frecuencia, al viajar a un sinfín de destinos por todas partes, no es extraño ver desde lejos el ceño de una persona que te recuerda a alguien y que, cuando te acercas, compruebas lleno de extrañeza que se trata de él, sí, de tu vecino, que también tuvo la feliz idea de viajar a aquella ciudad y, entre abrazos patrióticos, se repite el axioma: “Tiene faena, vayas a donde vayas siempre te encuentras a un lojeño”. Lo que se completa, ya para el colmo de los colmos, con: “No nos vemos en Loja y tenemos que venir aquí pa vernos”.
Se trata de una cuestión simpática y divertida que tal vez sea herencia de nuestro insigne viajero Don Alonso de Mercadillo, fundador de la Loja de Ecuador.
Sea como sea, y a fin de poder presupuestar nuestras escapadas, bueno será tener en cuenta algunos sencillos datos, tales como la distancia desde Loja a cualquier lugar del mundo.
Sin que esto responda a un concienzudo y riguroso estudio geográfico, y sí a una idea un tanto rocambolesca y romántica, este redactor se ha subido en el “globo de Google Earth” y se ha dado una vuelta por el planeta llamado Tierra, tomando como punto de partida la plaza de Arriba de la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Loja.
Trazando, con más intención que destreza, líneas rectas por el susodicho Google, y con más dosis de aproximación que de rigor matemático, se descubren algunas cifras curiosas, como las que, con todas las reservas, se exponen a continuación.
Así pues, de todos los analizados, el destino más lejano que podemos establecer desde nuestra ciudad es Wellington, capital de Nueva Zelanda, pues nuestras antípodas están, ni más ni menos que a 19.551 kilómetros, troches por donde troches. Le sigue, no muy lejos de allí, Canberra (Australia), a 17.616 kilómetros sobre montes, océanos, volcanes o lo que se ponga a tiro, que para eso no se tiene ninguna limitación espacial al emprender tan singular marcha.
Por el lado contrario, es decir, por el más cercano y a vista de pájaro, tenemos a Rute, con 26 kilómetros, Priego de Córdoba a 30 o Alcalá la Real, con 38; por no referirnos a los pueblos que están aquí al lado, formando parte casi de nuestra vida diaria.
Pero a fin de no hacer de este reportaje algo tedioso que impida su disfrute, gusten visitar la tabla que lo acompaña, en el que se suman destinos tan populares como Nueva York, París o Praga.